Por Luisa García Pelatti

Durante las últimas tres semanas, el patrón de contagios confirmados ha experimentado una pequeña reducción, de acuerdo con el análisis semanal que realizan el doctor Ibrahim Pérez y la demógrafa Judith Rodríguez. No obstante, no hay que bajar la guardia, advierten, porque la transmisión comunitaria es todavía muy alta y se desconoce si este patrón se mantendrá. La población enfrenta las restricciones en estos días de Navidad con cansancio y resignación, pero con la esperanza que ofrece la llegada de las vacunas.

La pandemia de COVID-19, que cumplirá 10 meses en la víspera de Navidad, acumula ya tres olas de contagios. Ahora estamos en la tercera oleada, que comenzó la semana del 5 de octubre. Es la más virulenta, con 5,234 casos en la semana del 16 al 22 de noviembre, el pico máximo de la pandemia. Ese nivel máximo se alcanzó dos semanas después de las elecciones.

Durante las últimas tres semanas se observa un ligero descenso en el número de casos positivos. De ese máximo de 5,234 casos positivos hemos pasado a 3,345 casos la semana siguiente, a 4,854 en la última semana de noviembre y durante la semana pasada los casos bajaron a 3,795. A pesar de este pequeño descenso, los expertos indican que la transmisión comunitarias es alta, con más de 3,000 casos positivos semanales.

“El mes de diciembre registra 64 casos COVID positivos promedio menos por día (603 vs. 539) que noviembre. Y no se ha registrado ningún día con más de 700 casos COVID positivos desde el 8 de diciembre, cuando se habían registrado 22 desde el 1 de noviembre hasta el 8 de diciembre. Eso, por sí solo, representa un cambio de rumbo importante frente al creciente aumento de casos que veníamos registrando entre octubre 5 y noviembre 22, y que parecía indetenible”, apuntan Pérez y Rodríguez.

El porcentaje de positividad –casos COVID positivos como total de pruebas moleculares realizadas– es un indicador de cuán diseminada está la infección en la comunidad y si las cantidades de pruebas realizadas son las recomendadas para el nivel de transmisión. El porcentaje de positividad deseado debe ser menor de 5%. En su informe, Pérez y Rodríguez estiman que ese porcentaje se mantuvo en 11% en las primeras tres semanas de noviembre y cayó a 10% la última semana  y a 9% la semana pasada.

“Un porcentaje alto indica que el número de casos positivos es muy alto o que el número de pruebas realizadas es muy bajo. El porcentaje de positividad nuestro ha permanecido casi inamovible entre 10%-20% durante los pasados dos meses, lo cual es indicativo de una alta transmisión comunitaria, en vista de que el número de pruebas diarias que estamos realizando es adecuado”.

Se ha producido un fuerte incremento en el número de pruebas rápidas de antígeno. Se ha pasado de casi 400 pruebas semanales de este tipo a más de 1,000 pruebas en las últimas dos semanas.

También se mantiene alto el número de defunciones. El promedio diario de personas fallecidas alcanzó en noviembre un nivel récord de 10.4. En diciembre está en 10.1. El número de pacientes hospitalizados ha estado por encima de los 600 diarios en los últimos 28 días, pero disminuyó a 540 el 19 de diciembre. Los pacientes COVID en intensivo han bajado a menos de 100 por día durante seis días consecutivos entre el 14 y 19 de diciembre.

Los expertos explican que es “fundamental y decisivo” reducir la transmisión comunitaria si se quiere abrir las escuelas en enero. “No será aconsejable. reabrir nuestras escuelas para los miles de estudiantes que aún permanecen en sus hogares. El potencial de propagación sería mucho mayor que el hoy existente, y por ende,muy riesgoso”.

Las órdenes ejecutivas no han logrado reducir la cantidad de casos de manera significativa y sostenida, dicen los expertos, que reclaman un cierre más estricto antes de reabrir las escuelas. La actual Orden Ejecutiva estará vigente hasta el 7 de enero.