Por redacción de Sin Comillas

Ante el anuncio de la próxima reunión de la Junta de Control Fiscal el sábado 28 de enero en Fajardo, el planificador José Tato Rivera Santana, coportavoz de la Concertación Puertorriqueña contra la Junta de Control Fiscal Federal, declaró que: “Los siete procónsules del ente federal se esconden en el lujoso Hotel El Conquistador para tramar e imponer cínicamente su agenda contra el pueblo puertorriqueño. Para ellos, opulencia, lujo y buena vida, para la clase trabajadora y en general para toda nuestra gente, austeridad, empleos precarios y sin derechos, despidos, menos servicios de salud, menos pensiones, más impuestos y menos educación”.

“Sencillamente, no se puede salir de la crisis económica empobreciendo y llenando de sufrimiento a todo un pueblo, es un contrasentido perverso. Tal como anticipamos, la Junta tiene como único propósito pagar a los bonistas con el dinero y los activos públicos a costa de los derechos y la calidad de vida que nos merecemos los hombres y mujeres de esta patria”, añadió la licenciada Ana Irma Rivera Lassén, también portavoz de la Concertación.

Por su parte, la líder sindical Luisa Acevedo, expresó: “Insistimos que es una burla y una ofensa al País que los gastos alegres de la Junta los tenga que pagar el pueblo puertorriqueño de unas arcas públicas diezmadas. Mensualmente el Departamento de Hacienda se ve obligado a enviarle $2 millones a la Junta para sus gastos de funcionamiento en momentos de tanta necesidad y precariedad en los servicios públicos”.

“El derecho a la salud, al trabajo, a la educación y a un retiro digno no tienen valor monetario ni se les puede asignar precio, como si fueran simples mercancías. Mucho menos se pueden comparar con la deuda a los bonistas. Quienes compraron los bonos de Puerto Rico, en su mayoría, conocían de las dificultades y los problemas económicos estructurales del País, por tanto, asumieron el riesgo, y si no cobran, como debiera ser, es en todo caso un daño autoinfligido. Esta crisis no la pueden pagar los sectores vulnerables ni los asalariados”, concluyeron.