Por Redacción de Sin Comillas
Tal y como habían adelantado algunos medios de comunicación, Red Lobster, una cadena de restaurantes especializada en mariscos con sede en Orlando, Florida, se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras el pasado domingo. La deuda supera los $10,000 millones.
Sin previo aviso, Red Lobster cerró la pasada semana 87 establecimientos en 27 estados, de un total de 650 locales que tiene en Estados Unidos.
La cadena se ha visto afectada por una menor afluencia de clientes, una caída drástica en las ventas en los últimos 12 meses y el alza en los precios de los alimentos. Las pérdidas ascendieron a $76 millones en 2023.
Algunos analistas señalan también a otro culpable de la quiebra: la oferta ilimitada de camarones por $20 lanzada el verano pasado. Un tema al que se ha denominado “el fiasco del camarón” y que puede generar problemas en el proceso de liquidación.
Thai Union, una empresa de productos del mar con sede en Tailandia, que posee el 49% de las acciones de Red Lobster, presionó para hacer la oferta y de esta forma impulsar la compra de uno de sus propios productos. Thai Union compra el 20% de todas las colas de langosta que se pescan en América del Norte y el 16% de todas las langostas de roca del mundo.
La empresa tailandesa desbancó a Golden Gate Capital de la propiedad de la cadena red Lobster, que había adquirido en 2014 a la empresa Darden Restaurants, creada por el fundador de Red Lobster, Bill Darden, en 1994.
Red Lobster tenía hasta la semana pasada cerca de 650 restaurantes en EEUU, donde emplea a 34,000 personas, y 27 en Canadá, con 2, 000 empleados, así como varias franquicias en México, Japón, Ecuador y Tailandia.
En Puerto Rico, los dueños de la franquicia en la Isla, el Grupo Colón Gerena, ya habían cerrado sus dos restaurantes hace unos meses.