Por Luisa García Pelatti

El sector financiero ha tomado el control de la economía y la exprime hasta asfixiarla, advierte el economista Michael Hudson (Chicago, 1939), profesor de economía de la Universidad de Kansas City. Dice que se avecina una crisis por exceso de deuda. Y haríamos mal en ignorar sus advertencias. Hudson fue uno de los ocho economistas que advirtieron del estallido de la crisis financiera en el 2008. La próxima crisis, avisa, podría ser incluso peor. 

En su libro, “Matar al huésped” (Killing the Host), explica que la estrategia de los acreedores es similar a la de un parásito: hacen creer al huésped que son parte de su cuerpo que lo cuidan y protegen. Pero en realidad desangran la economía, extrayendo los ingresos necesarios para producir.

Para Hudson, en la actualidad, el gran reto político es el exceso de deuda. Y no hay solución. “La deuda no se puede pagar, y no se va a pagar”, dice en una entrevista publicada el 29 de julio en el periódico español El País. No habla directamente de la deuda de Puerto Rico, pero considera que los culpables de la crisis son los mismos en todos lados.

El Gobierno de Estados Unidos y los acreedores no van a aceptar que se condone la deuda, por eso cree que o se produce un embargo masivo de bienes, como en 2008, o el sistema va a quebrar.

La crisis de deuda que está por estallar es consecuencia de que la economía no se recuperó en el 2008. Se recuperó Wall Street, se recuperó el mercado de bonos y el mercado inmobiliario, pero la producción y el consumo no se han recuperado.

Reconoce que la condonación de deuda afectará a los ahorradores. “El problema es que tres cuartas partes de los ahorros están en manos del 1%. Habrá también gente honesta que perderá porque el sistema es corrupto”.

Cuestionado sobre la necesidad de pedir préstamos, Hudson señala que nadie a los 20 a 30 años tiene dinero para pagarse la universidad o compara una vivienda, salvo que su familia sea rica. “Los bancos determinan el precio de la educación y de la vivienda en función de lo que te prestan”.

Después de trabajar como analistas para las firmas de Wall Street, Hudson se dedicó a estudiar las raíces históricas de la deuda en las antiguas civilizaciones: Roma, Grecia y Sumeria. Explica que en la Biblia ya existen referencias a la cancelación de la deuda, que fue uno de los argumentos de confrontación en el Imperio Romano.