El Gobierno contempla comprar proyectos residenciales construidos que no se han vendido para convertirlos en proyectos de vivienda de interés social. Esta es una de las estrategias para reducir el inventario de viviendas existentes, junto con la reducción de los precios, los estímulos, incentivos y ayudas, según explicó Ricardo Domenech, presidente de ScotiaMortgage, durante una entrevista en el programa “Es la economía, estúpido”, de Bonita Radio.

En el Departamento de la Vivienda hay iniciativas para adquirir proyectos que no se han podido vender y podría cualificar para viviendas de interés social o ponerlas a un precios accesible. El Gobierno también habría considerado comprar proyectos “conceptualizados” pero sin construir para el mismo propósito.

“Se ha pensado en vender a un solo comprador proyectos que todavía tienen unidades cerradas. Lo que se llama descuento a valor presente para un solo comprador”, explicó Domenech. “Aquí todo está puesto en la mesa”, dijo en referencia a que se estudian todas las alternativas posibles.

Entre las medidas que los bancos están tomando para tratar de reducir el elevado inventario de viviendas sin vender, el ejecutivo mencionó la retasación de todos los precios de las propiedades a valor presente, “para hacernos una idea declara de lo que el mercado está dispuesto a pagar”. Se trata en definitiva de bajar los precios de venta.

“Estamos viendo mucho interés en traer a valor presente unidades que van a tomar 4 o 5 años en vender”, dijo el experto. “La propiedad está construida, eso no va a cambiar, lo que queremos es ver si podemos devolverle el valor que tenía”. Sin embargo, Domenech advirtió que los precios no pueden caer hasta el extremo de perder capital. “Llegados a ese punto, es mejor regalar la propiedad”.

Las ayudas del Gobierno en forma de programa de estímulo para la compra también ayudan a reducir el costo de la transacción. “Entendemos que debemos participar de todas las iniciativas”, opinó Domenech.