Por Redacción de Sin Comillas

El Depar­ta­mento de Jus­ti­cia de Estados Unidos ha presentado una demanda contra Live Nation Enter­tain­ment, matriz de Tic­ket­mas­ter, a la que acusa de ope­rar un mono­po­lio en la indus­tria del entre­te­ni­miento en vivo.

La demanda, a la que se ha unido un grupo de fis­ca­les gene­ra­les esta­ta­les y de dis­trito de 29 estados y el Distrito de Columbia, alega que Live Nation domina ile­gal­mente el mer­cado de venta de entra­das y pro­mo­ción de con­cier­tos y ejerce una “influen­cia des­me­su­rada” sobre la mayo­ría de las salas de con­cier­tos en vivo en Estados Unidos. Según a demanda, la com­pa­ñía incluso tiene influencia en cómo se paga a los artis­tas y qué actua­cio­nes se rea­li­zan.

Como resul­tado de su posición dominante en el mercado, los asistentes a los conciertos pagan precio más altos, los artis­tas tie­nen menos opor­tu­ni­da­des de tocar en con­cier­tos, los pro­mo­to­res más peque­ños son expul­sa­dos y los luga­res de concierto tie­nen menos opcio­nes para los ser­vi­cios de venta de entra­das”, dijo Merrick Gar­land, fis­cal gene­ral de Estados Unidos.

Live Nation Enter­tain­ment se creó en 2010, tras la fusión de Live Nation, pro­mo­tora de con­cier­tos, y Tic­ket­mas­ter, pla­ta­forma que vende entra­das para even­tos en vivo.

Dan Wall, vice­pre­si­dente eje­cu­tivo de asun­tos cor­po­ra­ti­vos y regu­la­to­rios de Live Nation, res­pon­dió a las acu­sa­cio­nes del Depar­ta­mento de Jus­ti­cia y dijo que era “absurdo afir­mar que Live Nation y Tic­ket­mas­ter ejer­cen un poder de mono­po­lio”.

Según el Depar­ta­mento de Jus­ti­cia, Live Nation admi­nis­tra direc­ta­mente a más de 400 artis­tas musi­ca­les y posee o con­trola más de 60 de los 100 locales de concierto más impor­tan­tes de Estados Unidos. El grupo tam­bién con­trola alre­de­dor del 80% de la venta de entra­das de los prin­ci­pa­les luga­res.