Por Luisa García Pelatti
Moody’s Investors Service (Moody’s) degradó la deuda de la primera emisión de la Corporación del Fondo de Interés Apremiante, conocida como COFINA I, de Aa3 a A2, una bajada de dos niveles. La agencia mantuvo sin cambios la clasificación A3 de COFINA II. La perspectiva de ambas deudas cambió de estable a negativa. Moody’s también mantuvo sin cambios la clasificación Baa3 (el último nivel antes de inversión especulativa o chatarra) de las Obligaciones Generales (GO, por sus siglas en inglés). La perspectiva es negativa.
En su informe, Moody’s explica que la degradación de COFINA I se debe a la debilidad de la economía, que ha restringido el crecimiento de los ingresos fiscales.
Los informes de Moody’s se producen tras las dos reuniones que mantuvieron funcionarios del Gobierno durante las últimas dos semanas en las que informaron de su intención de realizar una nueva emisión de COFINA (COFINA III). Moody’s había degradado, en diciembre del año pasado, la deuda de las Obligaciones Generales Baa1 a Baa3, sólo un nivel por encima de lo que se considera “grado de no inversión” (bono basura). Ahora han decidido revisarla, aunque como confesaba la Secretaria de Hacienda, Melba Acosta Febo, el temor era que la degradaran a nivel de chatarra.
El Gobierno considera un triunfo que no se haya producido esa degradación. “El riesgo era una degradación a chatarra”, dijo la Secretaria de Hacienda.