Por Luisa García Pelatti
“El plan propuesto (para reestructurar la deuda) puede que no sea perfecto, pero es un compromiso de todas las partes y sería riesgoso empezar de cero”, dijo Ignacio Álvarez, presidente y principal oficial ejecutivo de Popular, Inc., al hablar sobre el proceso de reestructuración de la deuda en una mesa redonda con periodistas durante la presentación de los resultados del banco. “La cuestión de la deuda es una nube negra sobre Puerto Rico que crea mucha incertidumbre”.
Señala que resolver el tema de la deuda es un paso importante y bueno para Puerto Rico. “Los que cuestionan esta transacción están subestimando los riesgos de un escenario de no acuerdo”.
Álvarez es optimista, cree que el Senado aprobará la medida necesaria para emitir los bonos que recoge el Plan de Reestructuración y que el Tribunal confirmará el Plan.
Explica que, aunque Popular tiene una cantidad significativa de depósitos del Gobierno, el uso de esos fondos para el pago del servicio de la deuda no va a afectar la liquidez del banco porque esos depósitos cuentan con un colateral.
La construcción empezará a recuperarse el año que viene
Gran parte de los fondos federales para la reconstrucción no se han desembolsado todavía, pero ya se está viendo actividad y ciertos contratistas están solicitando aumentos en sus líneas de crédito. Pero todavía no hay solicitud de financiamiento para proyectos grandes. El banquero dice que no habrá mucha actividad en la construcción hasta la mitad del 2022
“Irónicamente toda la liquidez que ha entrado al sistema ha reducido la demanda de préstamos que ocurre cuando la economía esta creciendo”.
Asegura estar preocupado por la inflación. “Todavía hay personas argumentando que (la inflación) es un problema a corto plazo, por problemas de logística, y con el tiempo se va a arreglar. Creo que estamos viendo cambios estructurales en la economía y vamos a ver aumentos (de precio) en combustibles, salarios, costo de transporte. Yo estoy más preocupado por el peligro de inflación que otros”.