Por Redacción de Sin Comillas

Fiscales generales de 22 estados han presentado una demanda en contra del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para frenar la orden que deniega la ciudadanía por nacimiento a los hijos de inmigrantes ilegales.

Las demandas, que se presentan junto con varios de organizaciones pro migrantes, aseguran que la orden firmada por el presidente es inconstitucional y va en contra de la Decimocuarta Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.

La enmienda establece que todas las personas nacidas en Estados Unidos son ciudadanos de este país, sin importar el estatus migratorio de sus padres.

La orden, que entrará en vigor el 19 de febrero, prohíbe a los organismos federales reconocer la ciudadanía de las personas incluidas en las siguientes categorías: las personas cuyas madres no estén legalmente en Estados Unidos y cuyos padres no sean ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes legales, y las personas cuyas madres estén en el país legalmente pero de forma temporal y cuyos padres no sean ciudadanos o residentes permanentes legales.

La demanda ha sido presentada por 18 estados (Nueva Jersey, California, Massachusetts, Colorado, Connecticut, Delaware, Hawái, Maine, Maryland, Michigan, Minnesota, Nevada, Nuevo México, Nueva York, Carolina del Norte, Rhode Island, Vermont y Wisconsin), el Distrito de Columbia y la ciudad de San Francisco. Arizona, Illinois, Oregón y Washington presentaron una demanda separada en un tribunal federal.

La demanda pide al tribunal que declare que la orden es inconstitucional. “Despojar a los niños del ‘tesoro incalculable’ de la ciudadanía es un grave perjuicio”, dice la demanda. “Les niega la plena pertenencia a la sociedad estadounidense a la que tienen derecho”.