Por Rick Newman*

Como una montaña rusa. Así ha sido el comportamiento de la industria turística en Puerto Rico desde que el famoso virus del Chikungunya nos atacó en 2016. El Zika nos hizo leña luego de que el 2015 lo pasáramos encaminado hacia un crecimiento sólido. Pero, caímos en unos de esos valles de la montaña rusa. Las bajadas en ese “ride” son seguidos por una subida. Y así fue. Una buena subida en 2017, resultando en una caída aún más profunda, más veloz, y con demasiadas curvas que dejó a toda la Isla devastada. El huracán María impactó a la industria del visitante como nunca visto.  Pero, de nuevo, nos tocó la subida en la montaña rusa. Lento, pero seguro, fuimos subiendo con miras a una recuperación total.

Hello COVID-19. En marzo de 2020, cuando estábamos confiados en que íbamos por buen camino, superando los estragos dejados por María, llegó este virus de clase mundial, provocando un efecto nefasto sobre nuestro estilo de vida. De pronto, un pueblo acostumbrado a dar besitos, abrazos, y sonrisas, se convirtió en un pueblo asustado y distanciado. y de expresiones ocultas detrás de mascarillas. Aunque sabemos que el COVID nos ha trastornado la vida, nuestros negocios y nuestra economía, permanecemos confiados en que lograremos regresar a lo que siempre hemos sido y nos acoplaremos a la nueva normalidad.

Antes de la llegada del COVID-19, el turismo de nuestra Isla había demostrado su resiliencia. La responsabilidad de buscar resiliencia cayó en las manos de la industria, la Compañía de Turismo y la nueva organización de mercadeo de turismo conocido como la Organización de Mercadeo del Destino (DMO por sus siglas en inglés), creado por ley con meta específica de adoptar conceptos modernos y comprobados para atraer mayores visitantes a Puerto Rico. Nos encaminamos a retomar nuestra posición prominente en la región del Caribe.  Esta meta reconoce que la industria turística es de gran importancia, tanto para la economía como para la generación de miles de empleos.

A pesar de que el turismo se paralizó, al igual que muchos otros componentes de la sociedad, a causa del COVID, Puerto Rico se mantuvo activo y con presencia en los mercados de viajes. Cuando resucitó el deseo de la gente en viajar, dijimos presente. Los esfuerzos colectivos de los componentes del turismo y el enfoque del DMO, con la asignación de mercadear a Puerto Rico en el exterior para atraer visitantes, dio frutos durante 2021. La cantidad de visitantes que pernoctaron en hoteles, paradores, y alojamientos suplementarios, rompió récord. El índice más contundente para validar esta conclusión es el ingreso del arancel de habitación o “Room Tax”, como comúnmente se conoce. Según Turismo, esta cifra superó los $100,000,000 en 2021.

Moraleja… experiencia, realidad o como lo quiera llamar, está  ampliamente demostrado que con un esfuerzo en conjunto y con un norte común, Puerto Rico logrará una industria fortalecida, con resiliencia, y en tiempo récord.

  • El autor es propietario del hotel Verdanza