Por Luisa García Pelatti
En un mensaje con pocas concesiones al optimismo, el presidente de Oriental Financial Group (NYSE:OFG), José Rafael Fernández, cree que tras dos olas de consolidaciones bancarias una tercera es posible; advirtió sobre el peligro de no resolver los graves problemas económicos; prevé grandes recortes presupuestarios en Estados Unidos, que van a tener serias repercusiones en la Isla y augura un sombrío panorama para el partido que gane las elecciones en Puerto Rico el 6 de noviembre.
Fernández, que fue el orador invitado en la reunión del Club Rotario de Santurce, relató cómo ha cambiado la situación de la banca en los últimos años. “A mediado del 2000 todos los bancos estaban prestando y creciendo. En un punto la fiesta se acabó y eso costó la caída de tres bancos”. Esa, dice el presidente de Oriental, fue la primera ola de consolidaciones en la banca. La segunda ola fue cuando Oriental anunció la compra de BBVA Puerto Rico por $500 millones.
Estas dos consolidaciones redujeron el número de bancos en dos años de 11 entidades financieras a seis. Pero, aún así, Fernández cree que “todavía hay muchos bancos”.
La consolidación, asegura, está afectando la habilidad para prestar. “Hay demanda, pero al mismo tiempo va a tomar un tiempo para que los préstamos se recuperen”.
La clave está en la falta de crecimiento económico. “Puerto Rico se ha vuelto menos competitivo, menos atractivo respecto a otros países”. Y si nada cambia, advierte, la situación se va a deteriorar. Cree que la Isla puede volver a caer en un recesión, y esta vez peor, si cabe; que el ambiente social se va a deteriorar y que aumentará el número de los que emigran a Estados Unidos. “Y necesitamos hacer algo con el Sistema de Retiro”.
Los costo de energía y los costos laborales son muy altos. Hemos perdido competitividad. La tasa de desempleo es alta y la participación laboral baja. Para el presidente de Oriental, la solución es impulsar el crecimiento de las empresas locales y atraer más empresas extranjeras.
Es partidario de que el sector privado asuma un papel más comprometido en temas económicos. “El sector privado no puede ser pasivo, no puede estar callado. Tiene que hablar. Estos no son temas políticos. Son temas económicos” y añade, “no podemos depender del gobierno para que nos resuelva los problemas. Tenemos que unirnos y trabajar juntos”.
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, dice que quien quiera que las gane va a tener que hacer recortes. Estados Unidos va a reducir su presupuesto y eso va a afectar a Puerto Rico.
Sobre el exceso de inventario de viviendas, el banquero señala que el problema está en las viviendas más caras y que en ese segmento los precios todavía tienen que bajar más. Eliminar ese inventario tomará de tres a cuatro años más, asegura.
La fusión de BBVA con Oriental todavía debe recibir la aprobación de los reguladores, por eso no puede hacer declaraciones. Pero Fernández sí habló de lo que significa para Oriental la adquisición. Es una oportunidad de ganar mercado, de convertirse en el segundo banco de la Isla, con una cartera muy diversificado: 30% préstamos comerciales, 30% préstamos de consumo y 30% hipotecas. Un banco más grande, pero saludable.