Tras mostrar que la velocidad de la estabilización se ralentizó un poco en los últimos tres meses, en noviembre la actividad económica volvió a ganar velocidad, según el Índice de Actividad Coincidente elaborado por el economista Ángel Rivera Montañez. Por su parte el Índice de Indicadores Adelantados señala que la actividad económica en los próximos meses continuará estabilizándose y ha entrado en una fase de recuperación.

A pesar de las buenas perspectivas, la economía puertorriqueña sigue en recesión –en noviembre se cumplieron 68 meses–, aunque ahora es menos profunda y severa.

El Índice de Indicadores Coincidentes continua mostrando reducciones interanuales menos pronunciadas, lo que hace pensar que se podrá alcanzar un punto neutro en el 2012.

Rivera Montañez habla de que la economía se halla en los inicios de un proceso de estabilización, pero advierte que habrá que esperar a que este proceso madure para hablar de un proceso de recuperación permanente y declarar sin dudas el fin de la depresión.

El Índice de Indicadores Coincidentes se situó en noviembre en 90.5 puntos, un aumento de 0.2% cuando se compara con el mes de octubre. Este es el tercer aumento en los últimos seis meses. Se necesitarán al menos seis meses consecutivos de crecimiento para decir que la recesión ha terminado. Lo que significa que la actividad económica tendría que seguir aumentado en los meses de diciembre, enero y febrero.

En términos interanuales el Índice disminuyó 0.8%, se trata de la menor reducción desde mayo de 2006. Hay que recordar que la recesión comenzó en el mes de abril de 2006.

En los 68 meses que dura ya la recesión la actividad económica ha caído 16.5%. La recesión ha estado perdiendo fuerza en los pasados dos años.

El Índice de Indicadores Adelantados tuvo una lectura de 108.0 puntos en noviembre, un alza de 2.0% cuando se compara con el mes de octubre. Es el quinto aumento consecutivo en los últimos nueve meses y el más fuerte. Esto indica que la actividad económica se mantendrá en los próximos seis meses en esa fase de estabilización, salvo que surjan eventos negativos.