Por redacción de Sin Comillas
Mientras en Puerto Rico se han hecho 335 pruebas por cada 100,000 habitantes en Arizona han realizado 914 pruebas por 100,000 habitantes. Es el estado que hace menos pruebas, según un análisis de Daniel Santamaría Ots, analista sénior de Política Pública de Espacios Abiertos, utilizando datos de Covid Tracking Project. Y esa brecha sigue ampliándose.
Son muy pocas pruebas. No son suficientes si se quiere empezar a pensar en volver a restablecer la actividad de la economía. Según un estudio del Instituto de Salud Global de la Universidad de Harvard, se necesitan unas 152 pruebas diarias por cada 100,000 habitantes, lo que se traduce en unas 4,500 pruebas diarias. En Puerto Rico se han hecho entre 13 y 17 pruebas diarias por cada 100,000 habitantes. El último dato publicado por el gobierno indica que hasta el 23 de abril se habían realizado 12,680 pruebas, 506 más que el día anterior. Estamos muy lejos de esas 4,500 diarias.
Santamaría Ots llama la atención sobre otra métrica. La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que el nivel adecuado de pruebas positivas sobre pruebas totales debe estar ubicado entre el 3% y el 12%. Niveles por debajo del 3% indicarían que las pruebas no se están realizando adecuadamente y mayores del 10% reflejarían un nivel insuficiente de pruebas realizadas. En Puerto Rico ese dato se sitúa en 14%, fuera del rango recomendado por la OMS. Lo que significa que Puerto Rico debe ampliar la capacidad de detección del contagio.