El Secretario de Transportación y Obras Públicas, Ing. Rubén Hernández-Gregorat, y Jordi Graells, representante de Autopistas Metropolitanas de Puerto Rico, LLC (Metropistas), firmaron el contrato de Alianza Público-Privada para las autopistas PR-22 y PR-5. David Álvarez, director ejecutivo de la Autoridad para las Alianzas Público-Privadas, y Jonathan Hunt, vicepresidente de Goldman Sachs, participaron también en el acto que da paso a la inversión de $1,436 millones, la inversión privada en infraestructura más grande en Estados Unidos en lo que va de año.
Con dicha inversión, Metropistas—una entidad compuesta por el consorcio de Goldman Sachs Infrastructure Partners y Abertis Infraestructuras—financiará, rehabilitará, operará, y mantendrá por un plazo de cuarenta años las autopistas PR-22 y PR-5 según los estándares de clase mundial requeridos por el gobierno local. La inversión también permitirá a la Autoridad de Carreteras (ACT) saldar gran parte de su deuda pública.
“Creemos en Puerto Rico y estamos comprometidos con la Isla a largo plazo. Una firme relación con Estados Unidos, una economía con un potencial certero de crecimiento y un marco reglamentario transparente, que promueve la inversión privada mientras que protege el interés público, nos brindan la confianza para invertir en Puerto Rico y de considerarlo entre los destinos más atractivos para inversión a nivel mundial,” dijo Graells. “Auguramos que Puerto Rico se va a convertir en la referencia para otros estados de la nación de cómo se debe implantar el modelo de Alianzas Público-Privadas,” añadió el ejecutivo.
Como parte de la inversión total de $1,436 millones, más de $350 millones en inversión estimada irán para mejoras y conservación de la PR-22 y PR-5. Específicamente, un estimado de $56 millones se invertirá de manera inmediata—empezando este año y durante los próximos tres años—en obra dirigida a rehabilitar y mejorar la seguridad de estas dos autopistas. Esta obra incluirá mejoras al alumbrado, al pavimento, al sistema de desagüe, a las barreras de seguridad, a la rotulación de las autopistas, y a la rehabilitación de puentes y elevados, entre otras. Esta inversión inmediata deberá generar unos 1,000 nuevos empleos directos, indirectos e inducidos. Además, unos $300 millones se invertirán en los años subsiguientes para asegurar un mantenimiento recurrente en estas autopistas. Los empleados de la ACT que laboran actualmente en estas autopistas tienen sus empleos garantizados en dicha agencia.