Por Luisa García Pelatti

Hace cuatro años, en el 2008, el ganador de las elecciones se enfrentó a una economía que llevaba dos años en recesión y que todavía duraría casi cuatro años más. Este año el panorama no es menos sombrío. La recesión terminó, pero la crisis económica sigue, advierten los expertos. Y lo peor es que la economía de Puerto Rico corre el riesgo de volver a caer en una nueva recesión.

Por eso, que los datos permitan ahora confirmar que la recesión terminó en septiembre de 2011, no deja de ser un dato para un titular llamativo y una noticia oportunista un día antes de las elecciones. 

Los problemas siguen siendo los mismos: una deuda pública elevada, unos recaudos fiscal que sólo crecen impulsado por la Ley 154, una déficit actuarial en el Sistema de Retiro que supera los $33,000 millones y, en general, una economía que ha perdido la capacidad de crecer. Estamos abocados a un estancamiento secular.

El economista Angel L. Rivera Montañez ha podido establecer el mes de septiembre de 2011 como la fecha más probable del fin de la recesión que empezó em marzo de 2006. Para llegar a esta conclusión, Rivera Montañez ha utilizado sus Indicadores Coincidentes y  Adelantados correspondientes, cuyo último dato corresponde al mes de agosto.

“Mi impresión era que la recesión había terminado a fines del verano del 2011”, dice el economista Juan Lara, para quien lo importante es que “la crisis no termina y parece que tenemos recaída”. A juicio de Lara, “estamos en riesgo de caer otra vez en recesión” y los datos del Indice de Actividad Económica, que elabora el Banco Gubernamental de Fomento, “sugieren que ya estamos ahí”.

José J. Villamil, presidente de la Junta de Directores de la firma Estudios Técnicos, Inc., coincide en que la recesión terminó, pero “el problema estructural aún no se resuelve. Si el punto de inflexión fue septiembre de 2011 o no, es menos importante. Quizás lo más importante, y es algo que he dicho muchas veces, es que los economistas tendemos a pensar en ciclos de contracción y recuperación, pero que en el caso de Puerto Rico el problema es el deterioro en la capacidad de crecimiento a partir de los (años) setenta que se encubrió con el gasto público, el endeudamiento público y los fondos federales. El que no atendiéramos el problema estructural a tiempo y lo encubriéramos, ha hecho más difícil solucionarlo”.

Villamil explica que “lo que ocurrió en la década pasada fue que: no pudimos seguir emitiendo deuda para financiar la inversión pública, los fondos federales crecieron menos (ARRA es la excepción) y el sector de la construcción entró en crisis. Las dos recuperaciones de recesiones previas, la segunda mitad de los ochenta y la segunda mitad de los noventa se caracterizaron por un aumento dramático en la inversión en construcción, financiada por deuda en gran medida (aunque FEMA y los seguros ayudaron después de los dos huracanes). Ese aumento no fue posible en la pasada década por la situación fiscal, en parte causada por la forma como resolvimos las dos recesiones anteriores”.

Rivera Montañez, en una actualización de su informe del mes de agosto, indica que la recuperación es frágil y que existen riesgos (recortes federales, la situación en Europa, etc.) que pueden ocasionar una nueva contracción.

“Un aspecto importante a destacar es que debido que existe un periodo de recuperación bajo un entorno de debilidad estructural y con riesgos altamente significativos, cualquier efecto negativo de estos riesgos podría desembocar a un nuevo periodo recesionario y no necesariamente constituiría una continuación de la recesión 2006-11″, dice Montañez.

Cada vez parece más claro que para regresar al nivel donde estaba la economía en el 2006, antes de la recesión, deberemos esperar al 2019, al 2021 o al 2022.

En las últimas cuatro décadas, la economía de Puerto Rico ha sufrido cinco recesiones:

  1. En 1974 y 1975, hubo una recesión que duró 17 meses,
  2. La recesión de 1980 a 1982, duró 36 meses.
  3. La recesión más corta fue la ocurrida entre septiembre de 1990 y abril de 1991, sólo siete meses.
  4. Entre enero de 2001 y febrero de 2002 (13 meses).
  5. La recesión del 2006 a 2011 ha sido la más larga hasta ahora, 66 meses.