La Federación de Maestros se ha ido a la quiebra con una deuda de $7.8 millones. Los principales acreedores son los miembros de la Federación con $6.6 millones. La semana pasado la Federación había explicado, a través de un comunicado, que la decisión se ha tomado como medida de protección contra los ataques de la Asociación de Maestros y del Gobierno.
La quiebra busca evitar el embargo de la sede de la Federación, que ha sido obligada -por una sentencia- a devolverle las cuotas a miles de maestros. La demanda, interpuesta por la Asociación de Maestros a finales de 1999, resuelve que la Federación pague más de $4 millones a sus miembros.
“El Comité Ejecutivo de la Federación de Maestros determinó efectuar una reorganización económica al amparo del código federal. Durante los pasados años la Federación de Maestros ha sido víctima del ataque despiadado de los distintos gobiernos de turno porque nuestra Unión se ha mantenido firme y militante en la defensa de los derechos del magisterio y en contra de la privatización de nuestras escuelas. A raíz del exitoso Paro del 26 de agosto del 2010, el Secretario de Educación Jesús Rivera y el gobierno de Luis Fortuño, han desatado una ofensiva represiva contra la FMPR dirigida a destruirnos para dejar al magisterio indefenso y poder implantar las escuelas chárter y privatizar la educación pública. Por eso, le negaron las licencias sin sueldo a los miembros del Comité Ejecutivo, destituyeron de por vida a 11 dirigentes y, desde diciembre, cesaron arbitrariamente el descuento de cuotas a los miembros de la Federación de Maestros”, indica el comunicado.
Esa decisión ha significado que durante siete meses la Federación no ha tenido los recursos económicos suficientes para pagar los salarios de los miembros de nuestro Comité Ejecutivo y los demás empleados de la Unión.
“La Asociación en evidente alianza con el gobierno quiere despojarnos de nuestro edificio y demás recursos del sindicato y, eso no lo vamos a permitir. Los cuerpos directivos de la Federación de Maestros determinaron utilizar todos los recursos legales y políticos, a nuestro alcance para proteger las propiedades de la FMPR y garantizar la defensa del magisterio, máxime, en momentos en que el gobierno de Fortuño intenta imponer las escuelas chárter y despedir a 20,000 maestros y maestras. Por eso, el Comité Ejecutivo de la FMPR acordó efectuar una reorganización económica de la Unión al amparo de las disposiciones aplicables del código federal. La reorganización es una herramienta utilizada por corporaciones e individuos para evitar el estrangulamiento económico y asegurar la prestación de los servicios”.