La tasa de morosidad es la más alta desde 2015
Por Luisa García Pelatti
La morosidad en los préstamos concedidos por los bancos, que venía cayendo desde el 2010, experimentó un alza en el cuarto trimestre de 2017, hasta 9.08%, el nivel más alto desde el 2015, según los datos del Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC).
Las cifras cubren los meses de octubre, noviembre y diciembre. Se esperaba este aumento tras las dificultades de las familias después de los huracanes que azotaron la Isla en el mes de septiembre.
El valor total de créditos dudosos, que ha estado cayendo desde el 2009, se situó en el cuarto trimestre en $1,521.1 millones, un nivel mínimo en más de una década. La cifra es $276.7 millones menor que hace un año y $5.0 millones inferior a la del trimestre previo. El valor de los préstamos atrasados llegó a alcanzar los $7,700 millones a finales del 2010.
Las tasas de morosidad más alta siguen estando en las carteras de préstamos de construcción y desarrollo, donde 14.43% préstamos están atrasados. La morosidad en estas carteras alcanzaba el 51.21% en el 2015.
Los préstamos de los desarrolladores con atrasos aumentaron de $25.5 millones en el cuarto trimestre de 2016 a $29.4 millones en el cuarto trimestre de 2017. En el 2009 esta cifra ascendía a $2,834 millones.
La morosidad en hipotecas crece hasta 13.16%. Hace un año estaba en 10.59%. La morosidad en las tarjetas de crédito es una de las más bajas, 1.59%.
En el 2006, antes de la crisis, la morosidad apenas alcanzaba el 2%. Después, entre los años 2009 y 2012 la tasa de morosidad estuvo por encima del 10% y llegó a superar el 13%. Desde entonces había estado cayendo lentamente.
Por institución financiera, la tasa de morosidad más alta es la de Scotiabank, 14.36%, aunque está por debajo del 21.89% del año anterior. Hay que destacar el alza de la tasa de morosidad de Popular, que pasa de 6.54% en el cuarto trimestre de 2016 a 10.39% en el mismo periodo del 2017. La tasa de morosidad más baja la tiene Oriental, 5.54%.