Por redacción de Sin Comillas
La Reserva Federal, que lleva reunida dos días, deberá tomar hoy una decisión difícil: seguir aumentando las tasas de interés para controlar la inflación o hacer una pausa hasta la próxima reunión, dentro de seis semanas, para esperar que se calmen los mercados tras la tormenta financiera desatada tras el colapso de Silicon Valley Bank.
Haga lo que haga, la Reserva Federal recibirá críticas. Si sube las tasas las críticas provendrán de los que consideran que la crisis de los bancos regionales fue provocada por una política monetaria muy dura. Si no modifica las tasas, la inflación podría repuntar y crear más incertidumbre sobre la solidez del sistema financiero de Estados Unidos.
Algunos analistas apuestan por una subida un cuarto de punto porcentual, lo que situaría las tasas entre 4.75% y 5.00%. La Reserva Federal ha subido en ocho ocasiones las tasas hasta situarlas entre 4.5% y 4.75%, el empleo sigue creciendo y la tasa de desempleo (3.4%) es la más baja en 54 años.