Por redacción de Sin Comillas
La Unión Internacional de Arquitectos (UIA) anunció recientemente que un diseño de la firma puertorriqueña SCF Arquitectos ganó la medalla por el “Mejor edificio público” dentro de la competencia de la UIA “Espacios amigables accesibles a todos”. El anuncio se hizo durante su 25avo. Congreso Internacional, celebrado este año en Durban, África del Sur.
El proyecto ganador, el Centro Comunitario Ray y Joan Kroc del Ejército de Salvación, fue diseñado por el arquitecto Alberto Ferrer, AIA con la participación del arquitecto en entrenamiento Luis Yordán, y construido en Guayama en terrenos donados por la Universidad Interamericana.
La competencia estuvo abierta a proyectos de todo el mundo, ya que la UIA tiene más de un millón de miembros en 124 países. La organización sólo concedió tres premios: uno por un frente portuario en Grecia, otro por un jardín en Polonia, y uno por un edificio, que fue el de Puerto Rico. Además se concedieron nueve menciones honoríficas. Entre todos los anteriores, el proyecto diseñado por SCF Arquitectos fue el único premiado de todo el continente americano.
El premio concedido reconoce construcciones de excelencia arquitectónica que proveen accesibilidad a todos los usuarios, sin discrimen, para el disfrute pleno de todos. Reconoce además un diseño atractivo, inclusivo, y sostenible. “El diseño del proyecto tuvo como meta el fomentar la calidad de vida del núcleo familiar mediante un programa de educación, deportes, recreación y servicios espirituales, en un contexto de integración social en un ambiente amigable“, comentó el arquitecto Alberto Ferrer. Destacó además que el diseño no solamente cumple con, sino que supera, las normas aplicables sobre accesibilidad y libertad de movimiento para todos los usuarios, incluyendo los discapacitados.
La estructura consiste de varios módulos alrededor de un patio central, e incluye instalaciones de gimnasio, espacios para bailes y aeróbicos, un auditorio de usos múltiples y capilla, cafetería, centro de cuidado de infantes, oficinas de servicios sociales y administrativos, una piscina de adultos y otra para niños, y varias áreas de juego. También hay dos canchas de baloncesto bajo techo, que en caso de huracán u otro desastre natural se pueden convertir en un refugio para personas en necesidad.
Conforme la misión del Ejército de Salvación, el Centro está abierto a todo el que desee disfrutar de sus servicios, y fue construido cercano a comunidades de escasos recursos económicos con el fin de proveer a éstas diversos servicios educativos, recreacionales y deportivos. Comentó el Mayor Jorge Marzán, comandante de la División de Puerto Rico e Islas Vírgenes del Ejército de Salvación , que desde su apertura el Centro ha transformado la calidad de vida de sus usuarios y visitantes, entre ellos los residentes de las comunidades cercanas y el estudiantado y facultad de la Universidad Interamericana.
