Por redacción de Sin Comillas

El ex presidente del Centro Unido de Detallistas, Carlos Declet Jiménez, denunció que en el mercado de distribución de gas propano existe una distorsión en los precios creada por la entrada de la compañía Puma y pidió la intervención del Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO).

Declet señaló que se están anunciando unas ofertas con precios distorsionados para acaparar el mayor número de consumidores de manera forzosa con la única intención de sacar del mercado a las empresas nativas.

“La aparición de ofertas temporeras con precios por debajo del costo para atrapar a los consumidores y así  desplazar a los miles de empleados que trabajan en la distribución de este combustible en la isla, nos hace pensar que hay que tomar cartas en el asunto.  Llamemos las cosas por su nombre y apellido, en los últimos tres años hemos venido denunciado este ‘modus operandi’, en que opera la compañía Puma-Trafigura, cuyas actuaciones han sido investigadas y sancionadas por los Tribunales de Justicia de algunos países que ellos operan. Miembros de nuestra industria del gas licuado han denunciado todo esto ante las autoridades y el Gobierno de Puerto Rico, reclamando que este es un patrón similar practicado ya en Centroamérica, y Sur América, así como en el Caribe y ahora en Puerto Rico, cuya ejecución está prohibida por leyes estatales y federales”, explicó el ex presidente del Centro Unido de Detallistas.

“El mercado de referencia comparable con Puerto Rico es la costa este de Estados Unidos.  Allí fluctúan los precios al detal (retail) entregado en camiones tanques ‘bobtail’ en alrededor de los $3 dólares el galón, llegando hasta los $3.80 por galón, según muestra tomada en consumidores del Norte del Estado de New York.  En el Estado de la Florida los precios pueden fluctuar hasta $4.70 por galón.  Entonces vale la pena preguntarse la razón exclusiva de esta situación anómala.  En la isla de Puerto Rico la situación es más complicada, hay que considerar los agravantes de transportación marítima y los altos costos de almacenamiento”, señaló Declet Jiménez.

El mercado local de gas propano, está “devaluado o deprimido” en unos $1.50 aproximadamente.  Esta forma única de establecer precios de manera artificial permite ofrecer el producto por debajo del precio de venta al detal que se refleja en la costa este de Estados Unidos.  Se ha visto que el producto en algunos casos se está ofreciendo marginalmente al costo, rondando los $2 más o menos, y sacrificando márgenes promedios aceptados generalmente para esta operación de $1 a $1.50 como ocurre en los mercados comparables por los cuales se rige la industria.

“Hay que tomar en consideración que ésta es una industria que requiere una alta inversión para transportar y entregar el producto, cuyas operaciones tienen altos costos de mantenimiento en tanques en las felicidades de almacenamiento, en los camiones, las pólizas de seguros y el personal especializado, que lo diferencia a otros mercados», explicó.

«Es necesario que se estudie la posibilidad para que un panel provea asesoramiento a DACO en esta materia, pues en estos casos no funciona el libre mercado, por lo que tiene que ser regulado para prevenir las prácticas de control monopolístico que se está dando en la oscuridad y que amenaza seriamente desplazar el mercado local, a los miles de empleados y la posible desaparición de las plantas embotelladoras locales.  La industria del gas licuado en Puerto Rico ha sobrevivido a muchos intentos monopolísticos, sin embargo, hay seria preocupación por la presencia de cabilderos que día a día trabajan para forzar a los distribuidores locales a cerrar sus negocios para darle paso a compañías extranjeras, que dentro de un tiempo alzarán los precios a su propia conveniencia, sin tomar en cuenta la realidad y necesidades del consumidor”, añadió Declet Jiménez.