Por redacción de Sin Comillas
El Fondo Monetario Internacional ha revisado, aún más, a la baja las proyecciones de crecimiento para América Latina y el Caribe, que ahora sitúa en 0.5% en 2015, lo cual supone una desaceleración de la actividad por quinto año consecutivo.
El crecimiento más débil de lo previsto en Estados Unidos al comienzo del año ha empujado a la baja las perspectivas de crecimiento en México, América Central y el Caribe, mientras que el persistente descenso de los precios de las materias primas ha debilitado aún más el entorno externo para la mayoría de los países de América del Sur. Al mismo tiempo, algunos factores internos se han sumado a las dificultades de carácter externo, contribuyendo a debilitar la confianza de las empresas y los consumidores y, por lo tanto, a reducir la demanda privada. Además, la moderación de los precios de las materias primas y el alto nivel de apalancamiento de las empresas implican que la inversión probablemente seguirá siendo débil durante un período prolongado.
En conjunto, estos factores apuntan a que las perspectivas económicas en la región se enfriarán aún más. Además de las proyecciones de crecimiento más bajo para este año, prevemos un repunte más débil en 2016.