Por redacción de Sin Comillas

Rusia aprobó una ley que castigará con hasta 15 años de cárcel cualquier afirmación sobre sus acciones en Ucrania que califiquen como falsa. Se impide utilizar las palabras “guerra” o “invasión”. Moscú también bloqueó el acceso de sus ciudadanos a varios medios occidentales, entre ellos la británica BBC y la alemana Deutsche Welle. El veto también se extendió a las redes sociales Facebook y Twitter, ambas de propiedad estadounidense.

Tampoco se libran de la censura los medios rusos. El canal independiente Dozhd cesó el jueves sus emisiones tras haber sido bloqueado por el mismo motivo.

Medios internacionales, como la británica BBC, las estadounidenses CNN y ABC, las alemanas ZDF y ARD, la italiana RAI, la española RTVE o las agencias de noticias Bloomberg y EFE, han dejado de informar temporalmente desde Rusia y países como España han recomendado a sus nacionales salir inmediatamente del país por cierre de espacio aéreo. La seman pasada, dos periodistas de la cadena británica Sky News resultaron heridos después de que su automóvil, identificado como “prensa”, recibir disparos del ejército ruso.

Millón y medio de refugiados

El Alto Comisionado de Naciones Unidos para los Refugiados (Acnur) ha contabilizado un total de 1,534,792 de refugiados que han huido de la guerra de Ucrania, tras un aumento de unos 166,000 desde el viernes. Las autoridades de la ONU esperan que el flujo aumente, ya que el ejército ruso parece concentrar sus ataques en las grandes ciudades ucranianas. Ésta es la crisis de refugiados de más rápido crecimiento en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Según la ONU, hasta cuatro millones de personas podrían abandonar el país a causa del conflicto.