Por redacción de Sin Comillas

La actual sede del Colegio de Arquitectos y Arquitectos Paisajistas de Puerto Rico y de la Fundación por la Arquitectura, la antigua Casa González Cuyar ubicada en la calle del Parque 225, en Santurce, fue nominada para formar parte del Registro Nacional de Lugares Históricos del Servicio de Parques Nacionales de los Estados Unidos.

Alexandra Betancourt, presidenta del Colegio, señaló que la nominación tiene como objetivo “proteger la sede como parte del patrimonio histórico de Puerto Rico. Al ser una de las pocas residencias del “Prairie Style” que se mantienen conservadas en la zona de Santurce, que su restauración del 1993-94 se encuentra bien documentada, y cuyo arquitecto fue Rafael del Valle Zeno, un reconocido profesional en el campo de la arquitectura e ingeniería en Puerto Rico, su valor arquitectónico es incalculable”.

Añadió que “para poder formar parte del Registro Nacional de Lugares Históricos, la propiedad nominada debe cumplir con ciertos criterios. En este caso, la misma cumple con dos de los criterios, pues la propiedad representa las características de un estilo o periodo y está asociada con eventos que han hecho una contribución a nuestra historia. Sobre este último, la casa tiene un valor histórico social, pues representa la forma de vivir de las familias pudientes de principios de siglo 20”.

La Casa González Cuyar fue construida por Rafael del Valle Zeno cerca de 1910 para el matrimonio compuesto por Rafael María González y Luisa Cuyar, bajo lo que se conoce como el estilo Pradera, característico de la época de las residencias burguesas de principios del siglo 20 en la Isla, con influencias victorianas y francesas, típicas de la arquitectura de Del Valle Zeno. Más tarde, al ser adquirida por el CAAPPR, la propiedad pasó en 1993 por un amplio proceso de restauración a cargo de la arquitecta conservacionista Beatriz del Cueto, FAIA.

Una característica importante de su construcción fue el uso de materiales innovadores para la época, tales como bloques de concreto que simulan piedra, columnas exteriores de yeso, plafones de latón repujado, pisos de losas hidráulicas y diversos techos de madera recubiertos de metal corrugado a dos y cuatro aguas. Las columnas fueron compradas a través de catálogos técnicos disponibles en la época, una práctica innovadora en la construcción al momento en que la Casa González Cuyar fue construida.

Esta residencia, de un solo nivel, cuenta con un patio interior y tiene aproximadamente 6,000 pies cuadrados. Su diseño corresponde a las necesidades del clima tropical, al estar elevada sobre el terreno, y contar con amplios balcones en tres partes y techados que proveen protección contra los elementos. La escala del patio y el gran número de puertas, con las cuales cuenta la residencia, la mantienen bien ventilada y protegida de la humedad.

La sede también está compuesta por un anexo de estilo moderno, añadido en 2005, el cual respeta la integridad de la estructura histórica, así como las características tropicales de la casa original, como la ventilación cruzada en las áreas comunes.