Por redacción de Sin Comillas

“Puerto Rico se está quedando atrás en relación a las pruebas per capita para COVID-10”, señala el Centro para una Nueva Economía (CNE) en el resumen diario “Living with Risk”.

Al 31 de marzo, Puerto Rico era la penúltima jurisdicción en cantidad de pruebas de COVID-19 efectuadas por cada 100,000 personas en los Estados Unidos.

Según los datos recopilados por el COVID Tracking Project y analizados por CNE, Puerto Rico solo le está haciendo pruebas a 72 personas por cada 100,000. En Carolina del Sur se hacen 111 por 100,000 personas y en Mississippi 150 por 100,000, dos ejemplos de estados relativamente pobres, que se podrían comparar con Puerto Rico.

“La importancia de las pruebas no se puede enfatizar lo suficiente. Sin datos adecuados, no sabemos si las políticas de refugio en el lugar (“shelter in place”) están funcionando; no se pueden asignar recursos escasos de manera eficiente; no se pueden calibrar modelos estadísticos con precisión; y en general no se pueden tomar decisiones informadas de política pública”, comentó Sergio Marxuach, director de Política Pública del CNE.