Por redacción de Sin Comillas
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advirtió que “la actividad económica probablemente caerá a una tasa sin precedentes en el segundo trimestre del año”, y alertó de los riesgos a medio plazo, con mucha incertidumbre sobre la recuperación de empresas y empleos, y descartando un rebote en forma de V. Pese a todo, Powell predice que, durante el tercer trimestre, comenzará a notarse una mejora de la actividad y descartó un posible colapso del sistema financiero como el que se desató en 2008.
El comunicado, tras su reunión de dos días, refleja la gravedad de una situación que ha provocado una parálisis casi total de la economía en todo el mundo y, en el caso de Estados Unidos, le ha llevado a su primera recesión en 11 años.
La Reserva Federal señala que “la actual crisis de salud pública pesará mucho en la actividad económica, empleo e inflación a corto plazo, y plantea riesgos considerables a medio plazo”, a lo que se añade una demanda más débil y precios del petróleo significativamente más bajos que están frenando la inflación.
La Fed insistió en que utilizará todas herramientas a su alcance “para apoyar la economía de Estados Unidos en este momento difícil, promoviendo así su máximo empleo y el cumplimiento de los objetivos de estabilidad de precios”.
En su primera reunión programada de manera ordinaria desde que estalló la pandemia del coronavirus, la Reserva Federal ha evitado que los tipos de interés entren en terreno negativo y los ha mantenido en el rango de entre el 0% y el 0.25% que se fijó en marzo. La Fed insiste en que los tipos se mantendrán en el terreno de cero hasta que los expertos de la institución “estén seguros de que la economía ha resistido los acontecimientos recientes y está en camino de lograr su máximo empleo y estabilidad de precios”.