Por redacción de Sin Comillas
Los condados de Orange y Hillsborough, en el estado de Florida, se han visto beneficiados por la llegada de puertorriqueños, un aspecto que Moody’s Investors Service considera positivo para la clasificación crediticia de esos condados, que han experimentado una expansión de su actividad económica. Moody’s presentó este análisis en una nota publicada el lunes titulada “Puerto Rico’s Pain is Orange County’s Gain”.
El número de puertorriqueños empleados en el condado de Orange, donde está la ciudad de Orlando, aumentó 17.7% en los pasado cinco años, mientras que en Hillsborough (Tampa y St. Petersburg) el alza fue de 31.1%. La llegada de puertorriqueños ha aumentado la demanda de bienes y servicios, los recaudos del impuesto a las ventas y las contribuciones sobre la propiedad; y ha supuesto un impulso para el mercado de vivienda, señala Nisha Rajan, analista de Moody’s.
La tasa de desempleo en Florida se redujo de 11.2% en 2010 a 5.2% en septiembre de este año. Los puertorriqueños representan 15.1% de los empleados en el sector de transporte y almacenaje en el condado de Orange; y 13.9% de los empleados en servicios de educación y salud.
Moody’s subraya que el condado de Orange puede absorber el crecimiento de la población sin afectar los servicios que ofrece ya que la mediana de edad de los puertorriqueños que se trasladan allí es de 30.2 años, la mayoría son bilingües y pueden beneficiarse de las abundantes oportunidades de empleo disponibles.
Sin embargo, señala que un 30% de los puertorriqueños que se mudan a condado de Orange tienen entre 5 y 17 años, y representan el 19% de la población existente en este grupo de edad, lo que obliga a aumentar el presupuesto en el sistema escolar.
