Antonio Huertas, presidente de Mapfre

Por redacción de Sin Comillas

Mapfre Puerto Rico tuvo una pérdida de 8.3 millones de euros (unos $9.7 millones) en los primeros nueve meses del año, comparado con una ganancia de 15.0 millones de euros (unos $17.5 millones) en el mismo periodo del año pasado, debido a los terremotos en el sur de la Isla.

Los terremotos tuvieron un efecto total en el Grupo de 65.4 millones de euros (unos $76 millones), de los que 26 millones de euros (unos $30 millones) corresponden a Mapfre Puerto Rico, 31.6 millones de euros (unos $36.9 millones) a las unidades de reaseguro y 8.2 millones de euros (unos $9.6 millones) a Global Risks.

En Puerto Rico, la aseguradora Mapfre redujo su volumen de primas 5.6%, hasta los 294.5 millones de euros (unos $344 millones), como consecuencia de la no renovación de ciertas pólizas de condominios y autos.

En total, Mapfre obtuvo ganancias de 450 millones de euros (unos $525 millones) en los primeros nueve meses del año, lo que supone un descenso de 2.7% respecto al mismo periodo de 2019. Los resultados suponen una mejora, ya que en el primer semestre las ganancias habían caído 27.7%. En el tercer trimestre duplicó sus ganancias hasta 179.8 millones de euros (unos $210 millones), comparado con ganancias de 88.4 millones de euros en el mismo periodo de 2019.

Los resultados se vieron afectados por el COVID, los terremotos de Puerto Rico en 2020 y el tifón de Japón. La crisis Covid-19 ha supuesto una ralentización de la actividad económica y el confinamiento temporal de la población en la mayor parte de los países en los que MAPFRE opera; y todo ello en un entorno macroeconómico adverso, explica la compañía.

Los ingresos de Mapfre entre enero y septiembre de este año ascendieron a 19,051 millones de euros (unos $22,245 millones), lo que supone 11.9% menos que en el mismo periodo del año anterior, mientras que las primas se redujeron en la misma proporción (-11.9%).

En Estados Unidos, las primas alcanzaron los 1,349 millones de euros (unos $1,575 millones), un descenso de 10%, consecuencia no sólo de la crisis de la Covid-19 sino también de la reestructuración del negocio en la región. La estrategia basada en el crecimiento rentable y la venta de un inmueble eleva el beneficio en un 50%, hasta los 74 millones de euros (unos $86 millones).