Por Redacción de Sin Comillas
El temor a una recesión en Estados Unidos desató una tormenta en los mercados bursátiles mundiales el lunes, con fuertes caídas en Asia, Europa y Estados Unidos.
El detonante de las caídas ha sido el histórico desplome de la Bolsa japonesa. El índice Nikkei se ha hundido 12.4%, su peor jornada desde 1987.
En Europa, el Euro Stoxx 50 ha retrocedido 1.4%. En Estados Unidos, Wall Street ha comenzado la semana con pérdidas de hasta 6% en el Nasdaq Composite, el Dow Jones se ha dejado un 2.6% y el S&P 500 un 3%.
El índice Vix de turbulencia esperada en el mercado de valores de Estados Unidos, conocido como el “indicador del miedo” de Wall Street, subió por encima de los 65 puntos, el nivel más alto desde 2020.
Todo empezó el viernes pasado con la publicación de un débil dato de empleo en Estados Unidos. En julio se crearon 114,000 empleos, por debajo de los 175,000 que esperaban los analistas, y la tasa de desempleo aumentó hasta 4.3%.
Los inversionistas temen estos datos sean un indicio de que la economía de Estados Unidos podría entrar en recesión ante la decisión de la Reserva Federal de mantener sin cambios las tasas de interés hasta septiembre. Algunos inversionistas apuntan que la Reserva Federal habría sido demasiado lenta en responder a las señales de que la economía se estaba debilitando.
La publicación de los datos del ISM del sector servicios, que avanzó de 48.8 en junio a 51.4 en julio, clamó los ánimos de los inversionistas.
Ya el martes por la mañana, las Bolsas asiáticas se empezaban a recuperar, aunque los operadores advertían que se esperaba una volatilidad extraordinaria.