Por redacción de Sin Comillas
A finales del 2018, más de un año después del huracán María, las importaciones de gas natural volvieron a los niveles que tenían en el 2016, según información de la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés), el organismo de estadística y de análisis del Departamento de Energía de los Estados Unidos.
Las importaciones de gas natural se vieron afectadas con la llegada del huracán María, en septiembre de 2017. Puerto Rico importó 60.3 billones de pies cúbicos (Bcf) de gas natural líquido en el 2018, un nivel similar a los 61.3 Bcf de 2016.
La isla depende de la importación de combustibles para la generación de energía. Prácticamente la mitad de la generación de electricidad se prodice con productos derivados del petróleo y una tercera parte con gas natural, según datos de 2017.
Desde 2013 a 2016, en Puerto Rico se recibieron un promedio de dos cargamentos de gas natural al mes. Cada cargamento consistía de 2.5 Bcf o 159 millones de pies cúbicos al día (MMcf/d). Los cargamentos se reciben en el termina de regasificación de Peñuelas, que empezó operaciones en el 2005.
Después del huracán las importaciones disminuyeron. En los últimos tres meses del 2017 Peñuelas sólo recibió un cargamento al mes con una capcidad promedio de 46.4 Bcf, un 24% menos que el promedio mensual del año anterior.
Peñuelas volvió a recibir dos cargamentos mensuales cuatro meses después del huracán, aunque los esfuerzos para la restauración de la energía eléctrica tomaron más tiempo y no fue hasta abril de 2018 que el 95% de los clientes volvieron a tener energía eléctrica.
En agosto de 2017, un mes antes del huracán, la Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC, por sus siglas en inglés) había aprobado una expansión del 60% de la capacidad de regasificación del terminal de Peñuelas, de 186 MMcf/d a 279 MMcf/d. Pero según Ecoeléctrica, empresa dueña del terminal, la llegada del huracá, la caída del sistema eléctrico y el retraso en los esfuerzos para restauralo atrasaron la expansión hasta mayo de 2018. Desde entonces las importaciones han estado aumentado y alcanzaron un récord de 275 MMcf/d en septiembre de 2018.
Puerto Rico está buscando expandir aún más su consumo de gas natural para desplazar el uso de combustibles fósiles para la generación de electricidad. Sin embargo, debido a las restricciones que impone la Ley Jones, esa capacidad se ha visto limitada. La Ley Jones exige que las mercancías que se transportan en aguas entre Estados Unidos y Puerto Rico se realicen en embarcaciones de Estados Unidos. Una exención a esa ley permitiría a Puerto Rico importar gas natural de Estados Unidos o de otros países a precios más bajos.
Desde septiembre de 2016, Puerto Rico importa el 100% del gas natural de Trinidad y Tobago.
Eliminar el uso de carbón en 2020
Precisamente ayer, el gobernador Ricardo Roselló realizo una expresiones señalando que la meta es eliminar el uso de carbón el año que viene.
“Hemos establecido conversaciones con AES Energy Systems, firma dueña de la planta de carbón en Guayama, para en un corto plazo y como meta del 2020, tener otra alternativa de fuente de energía que reemplace el uso del carbón en Puerto Rico. Por el momento, hemos mirado la biomasa, renovables o el gas natura’, comentó en declaraciones escritas.
“Aunque el plan integrado establece la eliminación del carbón para el 2028, nosotros estamos comprometidos con los cambios para el nuevo modelo energético y ambientales. Es por ello que queremos culminar esta transición, a fin de eliminar el carbón como fuente de combustible para finales del 2020”, añadió. La meta es alcanzar un 100% de energía renovable para el 2050 y un 40% para el 2025.