Por redacción de Sin Comillas

La Reserva Federal ha sido el primer banco central en reaccionar a la amenaza económica del coronavirus bajando en medio punto las tasas de interés. La tasa se sitúa en un rango de entre 1% y 1.25%. El recorte ha sido mayor de lo que esperaban los analistas.

La medida no fue una sorpresa, lo que sí es sorprendente es que se produce durante la expansión económica más larga en la historia de Estados Unidos. Normalmente en esta etapa tardía de un ciclo de crecimiento, los bancos centrales suben las tasas para evitar el aumento de los precios, pero la inflación anual en Estados Unidos fue de solo 2.5% en enero.

Los economistas se cuestionan si será efectiva esta medida de política monetaria cuando se trata de reaccionar a un shock de oferta. Las Bolsas respondieron al anuncio con fuertes subidas.

“Los fundamentos de la economía de Estados Unidos siguen siendo fuertes”, subraya, en una declaración unánime, el Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal. “Sin embargo, el coronavirus plantea riesgos en evolución para la actividad económica”.

“Reconocemos que un recorte de la tasa no reducirá el ritmo de infección”, aceptó Powell. “No solucionará una cadena de suministro rota. Lo entendemos. No creemos que tengamos todas las respuestas. Pero sí creemos que nuestra acción proporcionará un impulso significativo [para] la economía”.

Donald Trump había pedido a la Reserva Federal llevar a cabo un “recorte grande” para compensar la ralentización económica. A Trump le conviene esta reducción de cara al año electoral para evitar que la economía se debilite.

Estados Unidos ya tiene más de un centenar de personas contagiadas con el coronavirus y seis personas han fallecido, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades del país norteamericano (CDC).

La expansión del coronavirus ha afectado especialmente a las aerolíneas y a las empresas turísticas por el evidente descenso en los movimientos de personas, pero también a las petroleras por la bajada del precio del crudo y a los bancos y compañías aseguradoras.

Por otro lado, los bancos son los principales perjudicados de la relajación de la política monetaria. Para la banca comercial las tasas bajas son sinónimo de márgenes más bajos. Para la industria de seguros, una opción menos de poner a resguardo sus activos de forma segura. La próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal se celebrará el 17 y el 18 de marzo y los expertos apuestan a que habrá una nueva bajada de las tasas.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial aseguraron el lunes que están listos para hacer frente a los desafíos económicos que plantea la epidemia del coronavirus para el mundo. El anuncio de estos dos organismos llegó después de que la Organización Mundial de Comercio (OMC) asegurara que la propagación de la enfermedad puede causar efectos “sustanciales” en la economía global, cuyo impacto se verá reflejado en los datos comerciales que se publicarán la próxima semana.