Por Luisa García Pelatti
La llegada de los fondos de recuperación y los pagos de las aseguradoras están mejorando la rentabilidad de los bancos. En el 2018, la rentabilidad de la banca de Puerto Rico logró aumenta hasta el 14%, la primera vez que alcanza una rentabilidad de doble dígito desde 2006. La clave de estos resultados está en la llegada de los fondos de recuperación, que hace que, por primera vez, los costos de los depósitos en Puerto Rico sean menores que los de los bancos de tamaño similar en Estados Unidos, explica Joseph Gladue, analista de Alden Securities, en un reciente informe.
Uno de los factores responsable de este cambio de tendencia, señala, es la “abundancia de fondos” que llegan para las labores de recuperación del huracán María, que asoló la Isla en septiembre de 2017. La segunda razón es el estancamiento del crédito en Puerto Rico, mientras que los bancos de Estados Unidos experimentan un crecimiento, aunque modesto.
“Como resultado, los bancos de Puerto Rico tienen menos necesidad de competir agresivamente por depósitos para financiar préstamos”, dice Gladue. También ayuda a mantener bajos los costos de los depósitos el cambio en la composición de éstos. Los bancos en Puerto
Rico ha reducido su dependencia de financiamiento a través de CD.
“Creemos que estos factores van a seguir influyendo en los costos de depósitos en el futuro”, prevé Gladue.
Por otro lado, los bancos se prepararon para un aumento en la morosidad después del huracán incrementando sus reservas, que ahora son significativamente más altas que antes del huracán. Pero el temido aumento en la morosidad no se ha producido.
El informe de Gladue incluye otros datos interesantes, como que el depósito promedio por sucursal en Puerto Rico es de $150,000, un 25% menos que los $199,000 de bancos similares en Estados Unidos.
Posibles consolidaciones
En el informe, el analista hace referencia a especulaciones en torno a que no habría finalizado el proceso de consolidación del sector bancario. Los bancos que se señalan más frecuentemente como posibles vendedores son Scotiabank y Banco Santander.
Debido a su tamaño, Popular, Inc. no podrá comprar entidades financieras completas en Puerto Rico, pero podría adquirir activos en carteras pequeñas, comenta Gladue.