Por Luisa García Pelatti

La morosidad en los préstamos concedidos por los bancos disminuyó a 8.05% en el tercer trimestre del año, según los datos del Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC). Es la morosidad más baja desde el 2008.

Entre los años 2009 y 2012 la tasa de morosidad estuvo por encima del 10% y llegó a superar el 13%. En el 2006, antes de la crisis, la morosidad apenas alcanzaba el 2%.

El valor total de créditos dudosos disminuyó hasta $1,845 millones, $221.9 millones menos que en el trimestre previo. El valor de los préstamos atrasados llegó a alcanzar los $7,700 millones a finales del 2010.

Las tasas de morosidad más alta siguen estando en las carteras de préstamos de construcción y desarrollo, donde casi dos de cada 10 préstamos están atrasados. La morosidad en estas carteras se ha reducido del 51.21% en el 2015 al 19.58% actual.

Los préstamos de los desarrolladores con atrasos disminuyó en el tercer trimestre hasta $25.2 millones. En el 2009 esta cifra ascendía a $2,834 millones.

La morosidad en hipotecas se redujo ligeramente en el tercer trimestre hasta situarse en 10.68%, el nivel más bajo desde el 2008.

La morosidad en las tarjetas de crédito es una de las más bajas, 1.59%.

Por institución financiera, la tasa de morosidad más alta es la de Scotiabank, 22.27%. En hipotecas, la morosidad es de 23.46% y en préstamos de construcción y desarrollo (61.05%) es la más alta.

Santander tiene la morosidad más baja, 5.60%, pero ha estado aumentado y ahora es la más alta de la institución financiera desde el 2011.