Por Luisa García Pelatti
La inversión privada en construcción cayó 3.1% en el año fiscal 2023, de $3,882.0 millones en el año fiscal 2022 a $3,761.1 millones en el 2023, según el Apéndice Estadístico del Informe Económico al Gobernador. Es la primera caída en tres años, tras el desplome de la inversión privada en el 2020, durante la pandemia. Por su parte, la inversión pública en construcción se elevó 44.7%, hasta $1,514.1 millones, la cifra más alta en tres años.
Las cifras de 2021 y 2022 han sufrido significativas revisiones este año. La inversión en privada se ha revisado al alza, de $1,227.8 millones en 2021 y $1,499.0 millones en 2002 a $3,245.4 millones y $3,882.0 millones, respectivamente. Mientras, la inversión pública se ha revisado a la baja, pasando de $2,928.2 millones a $1,504.9 millones en 2021, tras la revisión, y de $3,098.0 millones a $1,046.5 millones en 2022.
La inversión total en construcción subió 7.8%, hasta $5,727.3 millones, la cifra más alta en cuatro años. La inversión en construcción representa el 7.0% del Producto Nacional Bruto (PNB).
En el año fiscal 2018, tras el huracán María (septiembre, 2017), empezaron a llegar lentamente fondos federales para la reconstrucción y la inversión en construcción se disparó 232.9%, hasta $8,065.4 millones, impulsada por la inversión pública que se multiplicó por 13. La inversión privada subió 46.2%. La inversión en construcción se mantuvo alta en 2019, en $7,245.5 millones, para luego caer 48.6%, hasta $3,722.4 millones, y subir 37.9% en 2021 y otro 4.1% en 2022.
Hasta el 2018, la inversión pública en construcción más alta fue la del año fiscal 2012, con $1,464.8 millones y se asocia a la inyección de fondos ARRA (American Recovery and Reinvestment Act) para la recuperación tras la Gran Recesión de 2007-2009, utilizados principalmente en la construcción y remodelación de escuelas.