Por redacción de Sin Comillas
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Estados Unidos se situó en 8.3% en el mes de agosto cuando se compara con el mismo mes del año pasado, según datos de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos (BLS, por sus siglas en inglés). El IPC aumentó 0.1% entre julio y agosto.
La inflación se modera por segundo mes consecutivo, tras el 8.5% de julio y haber alcanzado un máximo de 9.1% en el mes de junio, gracias a la caída del precio de la gasolina, aunque el precio de otros combustibles sigue aumentando.
Preocupa la inflación subyacente, que no incluye alimentos y combustibles, que ha vuelto a aumentar y ya está en 6.3%. El costo promedio en el supermercado para una familia ha subido en $460 al mes, según datos de Moody’s.
La Reserva Federal, que se volverá a reunir la semana que viene, podría subir nuevamente las tasas de interés un 0.75 puntos porcentuales, lo que dejaría las tasas entre 3.0% y 3.25%. Con estas subidas, la Reserva Federal busca reducir la inflación.
