Por redacción de Sin Comillas

La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) autorizó el sábado el uso de emergencia de la vacuna contra el COVID-19 de la compañía Janssen, una subsidiaria de Johnson & Johnson.

Esta es la tercera vacuna contra el COVID-19 que recibe la autorización de la FDA. A diferencia de las otras dos, la de Johnson & Johnson no requiere que se mantenga a bajas temperaturas extremas y puede ser almacenada durante tres meses.

Se espera que la vacuna, de una sola dosis, empiece a distribuirse la semana que viene. Johnson & Johnson se ha comprometido a entregar cuatro millones de dosis la próxima semana y otras 16 millones de dosis para finales de marzo. En junio se habrán alcanzado las 100 millones de dosis. Cuando se suman las 600 millones de dosis de las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna que están programadas para llegar a fines de julio, habrá inyecciones más que suficientes para cubrir a cualquier adulto en Estados Unidos que desee una.

El gobierno federal está pagando $10 por cada dosis, una cantidad sustancialmente menor que lo que acordó pagar por las vacunas de Pfizer y Moderna.

La vacuna de Janssen mostró una efectividad del 72% en las pruebas clínicas realizadas en Estados Unidos. En todas las pruebas la efectividad fue del 85% contra formas severas del COVID-19 y 100% de efectividad para evitar la hospitalización y las muertes. Las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna tienen una efectividad del 95%.