Por redacción de Sin Comillas

El Plan Fiscal que la Junta de Control Fiscal espera certificar en la reunión de hoy prevé que la economía crecerá 2.6% en el actual año fiscal. Sería el mayor aumento desde el 2004.

Esta proyección es más optimista que la presentada por la Junta de Planificación en septiembre, que anticipaba un alza de 0.8% en el año fiscal 2022.

Para el año fiscal 2023, la Junta de Control Fiscal prevé un alza de 0.9% en el Producto Nacional Bruto (PNB), mientras que la Junta de Planificación había dicho que crecerá 1.7%.

La Junta de Control Fiscal es menos precisa sobre las proyecciones para los años siguientes. “El Plan Fiscal proyecta una contracción limitada en el año fiscal 2024 y un crecimiento real de nuevo en los años fiscales 2025 a 2028. A medida que los fondos de ayuda para catástrofes y el gasto de los fondos de estímulo federal y local para el COVID-19 disminuyen considerablemente y las tasas de crecimiento de las reformas estructurales se reducen, el crecimiento del PNB vuelve a su tendencia histórica negativa a partir del año fiscal 2029”, señala la Junta en un comunicado.

El nuevo Plan Fiscal se ha actualizado y refleja el Plan de Ajuste recientemente confirmado por el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito de Puerto Rico, además de los recientes aumentos de fondos federales y la recuperación económica de Puerto Rico.

La Junta de Control Fiscal destaca que en este Plan Fiscal el Gobierno “ha experimentado un aumento de los recursos disponibles, atribuible en gran medida al incremento del financiamiento federal. Las recientes directrices publicadas por los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) aumentaron considerablemente el financiamiento federal disponible para el programa de Medicaid. En consecuencia, los costos del programa que antes se preveía financiar con recursos del Gobierno los paga ahora el gobierno federal. Además, la mejora en el recaudo de ingresos locales como resultado de los programas de apoyo a los ingresos relacionados con el COVID-19 condujo a un crecimiento económico mayor de lo esperado”.

El nuevo Plan Fiscal proyecta una inflación de 3.8% para el año fiscal 2022, “cónsona con las tendencias de la economía estadounidense en general, antes de descender al 2.7% en el año fiscal 2023 y al 1.7% en el año fiscal 2024. Luego, se espera que la inflación se estabilice en una tasa a largo plazo del 1.5% al 1.9%”. En noviembre, la inflación se situaba en 4.3%.

Por otro lado, se proyecta que la población se reducirá a un ritmo anual promedio de alrededor del 0.9% debido a una combinación de factores demográficos y de emigración.