Agencias
Wall Street cerró al alza el jueves tras sufrir fuertes altibajos ante los apuros de los inversionistas para encontrarle sentido a los informes económicos mixtos.
El Dow Jones subió 143.08 puntos, el 1.3%, a 11,153.98 después de haber perdido hasta 45 unidades durante la sesión. El Standard & Poor’s 500 ganó 9.34 puntos, el 0.8%, ubicándose en 1,160.40, mientras que el Nasdaq retrocedió 10.82 unidades, el 0.4%, a 2,480.76.
Las solicitudes de cobro del seguro de desempleo presentadas por primera vez cayeron a su nivel más bajo en cinco meses y el gobierno elevó su pronóstico del crecimiento económico en el período abril-junio, pero un sondeo mostró que los directores generales de las compañías más grandes del país se muestran más pesimistas de lo que estaban hace sólo tres meses.
También, un número menor de estadounidenses firmaron en agosto contratos para la adquisición de viviendas, el segundo mes consecutivo de declive.
Por otro lado, Alemania votó para ampliar la capacidad del fondo de rescate de Europa, dándole seguridad a los inversionistas de que los legisladores trabajan para controlar la crisis deudora en el continente. Los bancos, que serían los que llevarían la peor parte si el problema empeora, avanzaron más que el resto del mercado.
Los acontecimientos en Alemania también disminuyeron las preocupaciones de que los bancos en Estados Unidos pudieran ser afectados por otra racha de turbulencia en el sistema financiero de Europa.
Los analistas dijeron que continuará la volatilidad en los mercados financieros mientras no se despejen más interrogantes sobre la crisis de la deuda soberana en Europa y la economía de Estados Unidos.
La medida que aprobaron los legisladores alemanes de ampliar el fondo de rescate financiero de la eurozona debe ser aprobado por los 17 países del bloque. De acuerdo con la iniciativa, el fondo de rescate podrá comprar deuda de los gobiernos y prestar dinero a países con problemas financieros. Finlandia la aprobó el miércoles
Los analistas advirtieron que persiste la vulnerabilidad de las acciones de los bancos si Europa fracasa en sus intentos por contener su crisis de la deuda.