Por redacción de Sin Comillas
La presidenta de la Asociación de Industriales de Puerto Rico, Waleska Rivera propuso que se adopte un sistema híbrido para el cálculo del Cargo por Cumplimiento Ambiental y Regulatorio (CCAR) para los usuarios industriales.
La posición de la AIPR es que la revisión tarifaria propuesta por la AAA no corresponde, sino que excede, sus necesidades fiscales y de cumplimiento regulatorio. De acuerdo a la información recopilada por la AIPR, entendemos que los recaudos del propuesto CCAR exceden $300 millones, cuando la propia AAA ha reconocido que necesita $137 millones para cubrir sus costos de cumplimiento ambiental y regulatorio en el AF 2014. Esta información está respaldada por el informe que la AAA le sometió a las agencias reguladoras en la emisión de bonos del 2012 y el Informe del Ingeniero Consultor Malcolm Piernie.
La posición de la AIPR es que todos los recaudos del CCAR deben ser destinados única y exclusivamente a costos estrictamente relacionados con cumplimiento con requisitos ambientales y otros requisitos reglamentarios (EPA, Salud, y Acuerdo Consentimiento del 2004), indicó la presidenta de los Industriales.
La titular de los Industriales además instó a la AAA a que reevalúe las soluciones e itinerarios acordados con la EPA y con el Departamento de Salud, para que se atemperen a la realidad fiscal de la agencia y que negocie con las agencias reguladoras variaciones de los acuerdos de manera que no se refleje en el cargo proyectado y finalmente en el consumidor.
En este esfuerzo, deben prevalecer criterios de equidad y razonabilidad. También instó a la AAA a que se esfuerce en cobrar las deudas por concepto de agua que tienen las agencias del gobierno y municipios que sumas cifras millonarias y que afectan las finanzas de la AAA para el cumplimiento de sus obligaciones. De igual forma, debe priorizarse la reducción de la pérdida de agua y el agua no contabilizada (62% del agua que la AAA produce), que tanto afecta sus finanzas y cuya cifra no es cónsona con las mejores prácticas aceptadas para una compañía de utilidades en los EEUU que se estiman en 10-15%.
En su propuesta a la AAA, los Industriales plantearon que en aquellos clientes industriales donde el contador sea menor o igual a 2” de diámetro, el CCAR se calcule a base del consumo/flujo; y en aquellos clientes industriales donde el contador sea mayor de 2″ de diámetro, se determine el CCAR a base del diámetro del contador. En la alternativa, debe permitírsele al usuario industrial o comercial acogerse al cálculo del CCAR a base de consumo o a base del diámetro del contador, lo que sea menos oneroso al usuario y que garantice su continuidad de operaciones. Si los recaudos son para inversiones capitales, se podría considerar cobrar el cargo trimestralmente, semi-anualmente, o inclusive anualmente, dependiendo de la necesidad de flujo de efectivo de la agencia.
Los Industriales presentaron ejemplos específicos del impacto del cargo a las industrias:
1. Compañía A, es una industria local que se dedica a la manufactura de productos de consumo que contienen agua. Dicha compañía tiene dos contadores de 4 y 6 pulgadas de diámetro y tiene un sistema de pre-tratamiento de aguas usadas con un metro de descarga de un diámetro de 4 pulgadas. Su consumo combinado promedio de agua es de aproximadamente 29,712 m3/mes y su descarga promedio por alcantarillado es de 17,860 m3/mes. Bajo la tarifa anterior a julio de 2013, su factura promedio era equivalente a un pago total anual de $1,009,473. A partir de julio de 2013, su factura subió el equivalente un total anual de $1,396,161 o un 43%. De aprobarse la revisión tarifaria objeto de la presente vista pública, su factura subirá ya no el 43% sino un 122% a un total anual de $2,212,379. Con la tarifa propuesta de CCAR, este cargo solamente sería de $874,522 anuales. Para manejar este costo tendrían que pasarlo al consumidor, reduciendo su competitividad y sus ventas, requiriendo la reducción de gastos en servicios y en nómina tanto de empleos temporeros como permanentes según han mencionado en la encuesta. Causando un impacto inflacionario en productos de consumo en PR.
2. Compañía B, es una industria multi-nacional que se dedica a la manufactura de productos para la salud. Dicha compañía tiene un contador de 8 pulgadas de diámetro. Su consumo combinado promedio de agua es de aproximadamente 57,531 m3/mes y tiene una cuenta combinada de agua y alcantarillado y tiene sistema de pre-tratamiento de aguas usadas. Bajo la tarifa anterior a julio de 2013, su factura promedio era equivalente a un pago total anual de $2,174,229. A partir de julio de 2013, su factura subió el equivalente un total anual de $2,975,227 o un 37%. De aprobarse la revisión tarifaria objeto de la presente vista pública, su factura subirá ya no el 37% sino un 120% a un total anual de $4,791,782. Con la tarifa propuesta de CCAR, este cargo solamente sería de $1,925,407 anuales. Para manejar este costo tendrían reducir en sus gastos de operación reducción servicios y nómina tanto de empleos temporeros como permanentes, y sus operaciones estarían en riesgo porque se reduce su competitividad comparado con producir en otras jurisdicciones o países, según han mencionado en la encuesta. Esto tendría un efecto adicional de encarecer los costos de los tratamientos de salud y cáncer afectando y poniendo en riesgo la vida de los pacientes que tanto lo necesitan al limitarse su accesibilidad por su costo.
3. Compañía C, es una industria multi-nacional que se dedica a la manufactura de productos para la salud que ha reducido significativamente sus operaciones en PR. Dicha compañía se suple de agua subterránea con un pozo de agua de su propiedad. Tiene un sistema de pre-tratamiento de aguas usadas y aporto inversión capital en la construcción de la Planta de Tratamiento de Barceloneta la cual construyeron las industrias y entrego a AAA. Tiene un metro de descarga de 6 pulgadas de diámetro. No tiene cuenta de agua con AAA, pero sí de alcantarillado. Su descarga promedio es de aproximadamente 108,358 m3. Bajo la tarifa anterior a julio de 2013, su factura promedio de alcantarillado solamente era equivalente a un pago total anual de $1,835,807. A partir de julio de 2013, su factura subió el equivalente un total anual de $2,412,317 o un 31%. De aprobarse la revisión tarifaria objeto de la presente vista pública, su factura subirá ya no el 31% sino un 116% a un total anual de $3,970,599. Con la tarifa propuesta de CCAR, este cargo solamente sería de $1,586,361 anuales. Costo que tendrían reducir en sus gastos de operación reducción servicios y nómina tanto de empleos temporeros como permanentes y su operación estaría en riesgo en PR al afectarse más su competitividad internamente con respecto a producir en otra jurisdicción o país, según han mencionado en la encuesta.
“El CCAR propuesto afectará las operaciones de las industrias de manera significativa, ocasionará un aumento en el nivel de desempleo dado el cierre de muchas operaciones y no incentivará la expansión y /o el establecimiento de nuevas industrias en la Isla, concluyó la presidenta de los Industriales.
Por su parte, la Asociación de Restaurantes de Puerto Rico (ASORE) se manifestό en contra de la revisión propuesta al CCAR durante su ponencia ante el Oficial Examinador de la AAA.
Según el presidente de ASORE, Carlos Morell, “el cargo debe mantenerse como ha sido diseñado, esto es, que el cargo sea por diámetro del contador mientras la AAA evalúa como diseñar tarifas según las particularidades de cada industria. Nuestra investigación refleja que muchos comercios, principalmente los pequeños y medianos, incluso podrían pagar menos que lo que pagaban antes de la revisión tarifaria, si cambian sus contadores”.
“Estimamos que la propuesta basada en bloques de consumo que impulsa la AAA para el cumplimiento del CCAR supone un aumento significativo que fluctuará entre un 117% a 121% del costo, por negocio. Un ejemplo, es que restaurantes que antes pagaban anualmente $36 mil por consumo, ahora pagarán $180 mil”. Mientras, si el aumento es por diámetro el aumento sería entre un 48% a 78% por restaurante. “Bajo este cargo, si el restaurante tuviese el contador adecuado el aumento sería menor, en consecuencia les convendría cambiarlo y entendemos que la AAA cuenta con la facilidad para hacer estos cambios”, dijo Morell.
Así por ejemplo, un comercio con un contador de 2” cuyo consumo sea adecuado para un contador de 5/8” pagaba antes de la revisión tarifaria: $289.61. Con la actual revisión tarifaria paga $1,146.29. Si se aprobara la propuesta del CCAR por consumo pagaría $416.69. A simple vista este cliente ahorró $729.60 si el CCAR fuera por consumo. Sin embargo, su situación podría ser aún mucho mejor. Si este cliente cambiara su contador a uno de 5/8” (con el CCAR actual-por diámetro-), este cliente podría pagar $170.83 mensual, lo cual significa un ahorro de $975.46 versus lo que paga con la tarifa actual.
Además, añadió que “nuestra industria no aguanta un aumento adicional. Nos preocupa que estos aumentos afecten de tal manera que veamos el cierre de varios restaurantes en la Isla, afectando directamente a muchas personas que son empleadas por estos”.
Morell expresó que la propuesta de AAA representa un aumento oneroso que agrava la situación precaria que la industria vive actualmente y que ya enfrenta altos costos de electricidad, además los nuevos impuestos asociados a la recién aprobada Ley 40, mejor conocida como la Ley de Redistribución y Ajuste de la Carga Contributiva. A su vez, se suma el impacto de aumento en costos de comida, transportación y seguridad.
Asimismo, el presidente de ASORE recalcó que los restaurantes son de los más afectados por las situaciones económicas y uno de los renglones en donde más se dan las quiebras en el País. “Han tomado medidas para disminuir el consumo de agua e implementar equipos de cocina más eficientes, equipos de baño de poco consumo y verificar cualquier pérdida de agua por filtraciones dentro de los restaurantes, pero los nuevos aumentos hacen cada vez más difícil poder operar”.
ASORE urgió a que se reconsidere el aumento tomando en cuenta su impacto en una industria que es un sector importante en la economía local de la Isla, ya que emplea a sobre 59 mil personas, genera más de $3,900 millones en ventas al año y compra más de $500 millones en producto local.
Por último, resaltó que “en ASORE estamos a la mayor disposición de colaborar con las entidades pertinentes para esbozar un plan de acción que atienda las necesidades fiscales de la Isla sin poner en riesgo el rol de nuestra industria, la cual incluye restaurantes, cafeterías, pizzerías y panaderías, entre otros”.