Por Luisa García Pelatti
La economía está dando señales de una incipiente estabilización. Si esa tendencia se sostiene no estaríamos hablando de crecimiento, sino mas bien de crecimiento cero en los próximos años. Pero eso, cuando venimos de nueve años de recesión, es “una buenísima noticia”, señala el economista Juan Lara, quien participó como orador el jueves en el XV Foro anual de perspectivas económicas en la industria de seguros.
Lara prevé que la economía se contraerá 1.9% en el actual año fiscal; crecerá 0.2% en el 2015; 0.9% en el 2016 y alcanzará un alza de 1.2% en el 2017. Este escenario asume que el gobierno toma el control de la situación fiscal.
Pero si el gobierno no logra cumplir sus objetivos de recaudos y tiene que hacer recortes adicionales o no puede cumplir con el pago de algunas de sus deudas podría darse un escenario pesimista que contempla una caída de 3.3% en el 2014 y que la economía no empezará a crecer hasta el 2017 y sólo de forma tímida.
¿Estamos de nuevo ante un nuevo espejismo?
En el 2011 se hablaba de que la economía se estaba estabilizando, pero el crecimiento nunca llegó…y después volvió a caer.
“Otra vez el Indice de Actividad Económica (IAE) parece mostrar una tendencia a moverse a terreno positivo. Eso no quiere decir que la economía esté bien, pero puede querer decir que estamos otra vez tocando fondo y que nuevamente se observa una estabilización en el IAE. La pregunta es si eso se va a sostener o no”.
La clave está en la situación fiscal, que hasta marzo mostraba una cuadro alentador. Pero la fuerte caída de los recaudos en el mes de abril ha cambiado el panorama.
El problema, explica Lara, es que esto sucede cuando falta poco para que termine el año fiscal y el gobierno no tiene tiempo para hacer ajustes. Habrá que seguir recortando gastos y aumentando ingresos; y eso no garantiza que la situación sea mejor en el próximo año.
“La degradación nos obliga a más austeridad”. La degradación de los bonos en febrero adelantó la meta de eliminar el déficit del año fiscal 2016 al 2015.
“Nos vemos obligados cuadrar el presupuesto con un año de antelación y eso requiere que las medidas de recaudos y recortes de gastos sean más fuertes y más intensas de lo que originalmente habríamos pensado”.
“Es necesario asegura que si hay que hacer recortes, se hagan, y que las medidas de recaudos estén bien diseñadas para que funcionen. Que le hagamos el menor daño posible a la economía y a la base contributiva”. Lo que Lara llama el blindaje fiscal. Si no, podríamos caer en “default”, lo que obligarían al gobierno a tomar medidas de ajuste mucho más severas.
El otro tema urgente es llevar a cabo las reformas económicas que se necesitan desde hace mucho tiempo: fiscal, laboral, industrial, energética y educativa. “Esto es algo que no podemos seguir aplazando”.
Pero para pasar de la estabilización económica y el crecimiento cero al crecimiento económico se necesitan proyectos, que tendrán que venir del sector privado, pero en los que el gobierno tendrá que hacer de promotor.