Este mes Ford presentará la nueva y resideñada Escape SUV con un elemento innovador en su segmento. Se trata del sistema de manos libres en la puerta trasera que abre con simplemente un gesto del pie en la parte baja del parachoque, sin la necesidad de utilizar la llave.
La nueva Escape, la cual debutará en el Auto Show de Los Ángeles en noviembre 16, será la primera SUV que utilizará la tecnología sensorial de movimiento – similar a la que encontramos en video juegos. Un gesto sutil con el pie en el centro del parachoques trasero activa el sistema y abre la puerta trasera. El mismo gesto se utiliza para cerrarla.
“El sistema de manos libre para abrir y cerrar la puerta trasera es una de las innovaciones tecnológicas desarrolladas por Ford con el fin de hacerle la vida más fácil a los consumidores”, dijo Waldo Galán, director regional de Ford Business International Development para Puerto Rico, el Caribe y el Centroamérica. “Los dueños de la nueva Escape podrán montar con facilidad los paquetes, cajas, maletas o cualquier equipo en la parte trasera del vehículo, sin tener que soltarlos para buscar la llave“.
La tecnología sensorial de movimiento o sistema de manos libres utiliza dos sensores en el parachoques trasero, los cuales perciben el movimiento que realiza la persona con su pie. El sistema es seguro ya que está programado para que abra con movimiento de piernas y no cuando un animal pasa por debajo del vehículo o cuando el vehículo golpea un objeto en la carretera. Además, se puede programar la altura de apertura de la puerta.
La nueva y rediseñada Escape estará disponible en la primavera de 2012 y es otro de los modelos globales de Ford basado en la plataforma del segmento C, la cual será utilizada como la base para más de 2 millones de vehículos de Ford alrededor del mundo.
El vehículo contará con un sistema de eficiencia de combustible con un motor de cuatro cilindros, incluyendo versiones con el popular motor Ford EcoBoost de 1.6 y 2.0 litros.
La Escape se construirá en la planta de ensamblaje de Louisville en Kentucky, en la cual la compañía ha invertido $600 millones en rediseñar la infraestructura y está en el proceso de añadir 3,100 empleos para lanzar dos nuevos turnos de producción para finales del año siguiente. Esta popular SUV se introdujo al mercado por primera vez en el 2000 y desde entonces se han vendido alrededor de 2 millones de unidades.