WASHINGTON (AP) — El Fondo Monetario Internacional ajustó el lunes a la baja la expectativa de crecimiento económico de América Latina y el Caribe, que quedó en 3.2% para 2012 y en 3.9% para el próximo año.
Al inaugurar la reunión del otoño boreal que celebrará esta semana en la capital japonesa, el FMI difundió su último pronóstico de crecimiento de este año, en el cual advirtió sobre la necesidad que tienen los gobiernos de controlar la inflación regional promedio, anclada en 6% este año y el próximo, aunque sostuvo que los flujos de capitales se mantienen saludables y las condiciones financieras favorables.
El FMI había pronosticado en julio que América Latina y el Caribe crecería 3.4% este año y 4.2% el próximo, y atribuyó su ajuste a la baja a una moderación mayor a la prevista en otras regiones del mundo, especialmente en Asia, la cual debilitó la demanda externa de bienes y servicios ofrecidos por América Latina.
Numerosos países del Cono Sur han logrado un crecimiento económico importante durante años recientes gracias al incremento en el precio de las materias primas que exportan principalmente a China, cuya economía solo crecerá este año 7.8% tras lograr 9.2% en 2011 y 10.4% en 2010.
De esta manera, la región alcanzará este año un crecimiento igual al de la economía mundial —tras haberlo superado por 0.8% en 2011 y 1.1% en 2010— pero duplicará el ritmo de crecimiento de los países avanzados, que apenas registrarán 1.3% este año y 1.5% el próximo.
Perú mostró la tasa de crecimiento en 2012 más elevada (6%), seguido por Venezuela (5.7%) y Chile (5%), mientras que Paraguay tendrá el menor crecimiento (-1.5% respecto al 4.3% del 2011), seguido por el 1.5% de Brasil, que podría mostrar una recuperación a fines de año gracias a una “liberación reciente” de su política monetaria.
Thomas Helbling, jefe del departamento de Investigación del FMI, dijo en conferencia de prensa que la desaceleración de la economía brasileña fue inicialmente deliberada para evitar riesgos de inestabilidad financiera y de una burbuja crediticia pero “coincidió con una desaceleración de la economía global más severa de lo esperado”.
“Las autoridades han relajado las políticas acertadamente y hemos visto que las políticas de estímulo tardaron en tener efecto porque la desaceleración global también causó problemas en el sector financiero, pero ahora vemos estadísticas de que el crecimiento ha comenzado a acelerarse”, agregó Helbling, quien apuntó que la expectativa de crecimiento para 2013 podrá ascender al 4%.
Al referirse a las políticas adoptadas ante la desaceleración exhibida por Brasil y las otras dos principales economías emergentes —China e India— el economista jefe del FMI Olivier Blanchard negó que fueran señales de una contracción brusca.
“De hecho, vemos medidas positivas adoptadas en los tres países, pero los números señalan que estos países verán su crecimiento debilitado por algún tiempo, al menos más lento que las tasas altas que hemos visto previamente”, agregó.
El declive más agudo en el continente lo mostró Argentina, que solo alcanzará 2,6% este año respecto al 8.9% del 2011, y donde la inflación al igual que en Venezuela genera preocupaciones “particularmente agudas” porque “las políticas no han sido restringidas de manera obvia y la inflación continúa a niveles altos”, señaló el informe.
El FMI prevé las mayores tasas inflacionarias del continente en Venezuela (23%) y en Argentina, país al que le dio plazo hasta diciembre para que ajuste sus estadísticas oficiales sobre crecimiento económico e inflación porque no las considera fiables.
Colombia registró la tasa de desempleo más elevada (11%), seguida de Estados Unidos (8.2%) y Venezuela (8%). La más baja fue el 4.8% de México, cuyo crecimiento de 3.8% este año probablemente descienda en 2013 a 3.5% debido a las “perspectivas de crecimiento a corto plazo más débiles en Estados Unidos”.
El conjunto de los siete países centroamericanos perderá medio punto porcentual para crecer este año 4.3%.