Por Redacción de Sin Comillas
Ferrovial, la compañía española con sede en Países Bajos, construirá la nueva pista de aterrizaje del aeropuerto Rafael Hernández de Aguadilla. El costo del proyecto es de $400 millones y se dividirá en tres fases, que se llevarán a cabo sin afectar la actividad del segundo aeropuerto de la isla en volumen de pasajeros.
La primera fase, a un costo de $239 millones, incluye la construcción de una pista de unos 3.3 kilómetros de largo por 45 metros de ancho, compuesta por una superficie de pavimento de hormigón. La pista existente se convertirá en una calle de rodaje paralela de longitud completa.
La segunda fase contempla la ampliación de la terminal de pasajeros, un contrato en el que Ferrovial también está interesado.
Para llevar a cabo estos trabajos Ferrovial se apoyará en el grupo estadounidense Webber, una empresa con sede en Texas que adquirió en 2009. Además, ha formado consorcio con el grupo Aecom, que cuenta con una subsidiaria en Puerto Rico, URS Caribe, LLP, con oficinas en el Viejo San Juan.
Para obtener el contrato Ferrovial se enfrentó a las ofertas presentadas por la empresa española Acciona, la canadiense Aecon y Jacobs, con sede en Dallas, Texas.
Ferrovial ha elevado su cartera de producción en Puerto Rico de manera relevante en los últimos meses. En abril ganó un contrato de $150 millones con el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (USACE, por sus siglas en inglés) para reemplazar el puente de la avenida Roosevelt por uno más ancho.
Ferrovial se estableció en Puerto Rico en 2008 y ha sido responsable de más de 70 proyectos, entre ellos la construcción de los túneles de Maunabo, el muelle 3 del Puerto de San Juan y la reparación del puente atirantado de Naranjito.
Ferrovial es una multinacional español con sede en Países Bajos, que opera en el sector de las infraestructuras de transporte y movilidad a través de cuatro divisiones: Autopistas, Aeropuertos, Construcción e Infraestructuras energéticas y de movilidad. En aeropuertos, el mayor proyecto de la compañía es la construcción de la nueva Terminal 1 del JFK de Nueva York, un proyecto de $10,000 millones.