Aumenta el número de personas que tiene un empleo, pero no está trabajando.

Por Luisa García Pelatti

En el mes de febrero había 847,900 personas empleadas (datos ajustados estacionalmente), el nivel más bajo para un mes de febrero en 30 años. El empleo asalariado no agrícola subió 0.1% respecto al mes de enero y está 4.0% por debajo del mes de febrero del año pasado. Se cumplen ya 12 meses de caídas interanuales.

El sector privado perdió 31,500 empleos respecto a febrero del año pasado y se situó en 653,000.

El empleo en el Gobierno experimentó una caída de 2.1%, , la quinta caída consecutiva, hasta 194,900 personas, el nivel más bajo en, al menos, una década. Son 3,200 empleos menos en el gobierno estatal y 1,500 menos en los municipios.

Por sectores, las mayores pérdidas de empleo fueron en Recreación y Alojamiento, con 9,300 empleos menos que en febrero del año pasado; Servicios Educativos y de Salud (-8,600); Servicios Profesionales y Comerciales (-6,000); Información (-3,900); y Comercio, Transporte y Utilidades (-3,500). El empleo sólo aumentó en los sectores de construcción (2,000) y manufactura (1,400).

La tasa de desempleo (ajustada estacionalmente) se situó en 9.2%, ligeramente por debajo del 9.3% del mes de enero.

Uno de los efectos del COVID se observa en el aumento en el número de personas que tenían un empleo, pero no están trabajando. En enero había 30,000 personas en esta situación y aumentó a 35,000 en febrero, 9,000 personas más que en febrero del año pasado. El número de personas con empleo no trabajando llegó a estar en 217,000 en mayo del año pasado. La tasa de desempleo aumentaría hasta 9.6% si se incluyera a este grupo.

El efecto del COVID-19 también se observa en las personas fuera del grupo trabajador que quieren trabajar. Este grupo incluye a las personas que quieren un empleo, pero no buscaron trabajo activamente en las ultimas cuatro semanas o no estaban disponibles para aceptar un trabajo, por distintas razones.

En febrero de 2021, el estimado de personas fuera del grupo trabajador que querían trabajar fue de 44,000 (no ajustado estacionalmente). Este grupo, que potencialmente se puede incorporar al grupo trabajador, era de 66,000 en enero.

Tras un año de pandemia, se nota también una reducción en el número de desempleados de larga duración. De las 96,000 personas desempleadas en febrero, 32.2% han estado 15 semanas o más sin trabajo. En el mes de enero estaban en esa situación un 42% de los desempleados.

El año 2020 cerró con una caída de 6.4% en el empleo, la mayor en los últimos 30 años. En empleo asalariado cayó hasta 824,500, una cifra sin precedentes en los datos del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, cuya serie histórica comienza en 1990.