Por Luisa García Pelatti

En los primeros meses del año pasado, tras salir del estricto confinamiento, el precio de la vivienda nueva se disparó, llegando a superar los $300,000. Los datos del mes de abril indican que se está produciendo un ajuste de precios.

El precio promedio de la vivienda nueva cayó en abril a $217,520, el más bajo desde septiembre, según datos de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF). El precio supone un descenso de 19.9% cuando se compara con el mes de marzo. No se puede comparar con abril del año pasado porque ese mes no se pudo recopilar información.

El precio de la vivienda usada se redujo a $170,011, una caída de 7.8% respecto al mes de marzo.

En abril, se vendieron 1,062 viviendas, 157 menos que en marzo y la cifra más baja desde enero. Se vendieron 86 viviendas nuevas, un 23.9% menos, y 976 viviendas usadas, una caída de 11.8% cuando se con el mes previo.

En el 2020 las ventas de viviendas cayeron 8.3%, hasta 10,209, el primer descenso en tres años. Las ventas anuales de viviendas –que superaban las 16,000 unidades en el 2011 y se habían mantenido en torno a las 10,000 unidades anuales desde el 2013– cayeron hasta 8,797 viviendas en el 2017 afectadas por el huracán María. Era la primera vez en más de una década que las ventas anuales caían por debajo de las 10,000 unidades al año.