Por Luisa García Pelatti
Una enmienda a la Ley de Bancos ha reducido de 10 a 3 años el tiempo para reclamar las cantidades abandonadas por clientes en bancos. Con este cambio, el gobierno tendrá que esperar menos tiempo para utilizar esos fondos. El objetivo es utilizar el 85% de estos fondos para que la Autoridad para el Financiamiento de la Vivienda (AFV) los utilice en incentivo para adquisición de viviendas. El 15% restantes se utilizará para repagar a instituciones financieras el dinero que dejaron de cobrar de incentivos bajo leyes anteriores. Cuando se termine de repagar esta deudas las el 100% de los fondos irán para la AFV.
Todos los bancos están obligados a rendir a la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), anualmente, un informe con las cantidades no reclamadas por los clientes durante los cinco años anteriores a la fecha del informe. Ese dinero lo custodia la OCIF y ahora lo hará durante un período inferior de años.
El año pasado había más de $130 millones en Fondos no Reclamados bajo custodia de OCIF. No tenemos información de a cuánto asciende la cifra este año.
La enmienda también elimina el aviso que se publicaba en los periódicos con la cantidad de dinero existente en la cuenta abandonada o no reclamada, así como la última dirección conocida de las personas según se requiere actualmente. El propósito es proteger el derecho a la intimidad y propiedad de los ciudadanos.
