Por Raúl Figueroa Rodríguez*

Nuevamente un documento, en esta ocasión del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, promueve la discusión del tema de la fuga de talentos fuera de Puerto Rico. En el documento titulado The Causes and Consequences of Puerto Rico’s Declining Population, los autores describen lo que para ellos son las causas principales y consecuencias de la pérdida de población de Puerto Rico. Uno de los puntos de mayor controversia es cuando intentan determinar si la emigración reciente se puede considerar una fuga de talentos. Finalmente, no llegan a ninguna conclusión, pero plantan la duda.

El debate sobre la fuga de talentos es uno muy superficial que se limita principalmente a una variable demográfica sobre el nivel de educación. El nivel de educación es importante, pero no determina el talento ni la productividad de las personas, ni tampoco su contribución a la sociedad. La discusión del tema se ha minimizado a ver la proporción de personas con estudios universitarios que están emigrando. La situación real es mucho más compleja. Se comparan los emigrantes con la población de Puerto Rico en términos generales cuando ambas poblaciones tienen una estructura de edad muy diferente. Los emigrantes tienen una estructura de edad mucho más joven que los residentes en Puerto Rico lo cual tiene un efecto en la variable de educación alcanzada.

Por tanto, parece como si algunas personas quisieran restarle importancia a la emigración de los que no han alcanzado una educación universitaria. En un territorio con su fuerza laboral disminuida y que continúa perdiendo la misma rápidamente, cada persona que emigre, particularmente en edades productivas representa una gran pérdida, independientemente de su nivel educativo. Hay que recordar que quienes emigran no son los cerebros, si no las personas que, al final del día, podrían ser las piezas claves para el desarrollo económico y social de Puerto Rico.

* El autor es demógrafo, salubrista, co-autor del libro Puerto Rico 2000-2010: Más Allá del Censo y autor de The Elders’ Colony. Publica el blog Demografía para todos.