Por Redacción de Sin Comillas

Los gases de efecto invernadero y las temperaturas mundiales siguen batiendo récords. Con las políticas y los compromisos actuales, se estima que el calentamiento global será de hasta 3 °C a lo largo del siglo, apunta el informe Unidos en la ciencia, publicado este miércoles por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en colaboración con otras instituciones.

Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, hizo un llamamiento para que se tomen “medidas urgentes y ambiciosas” en apoyo del desarrollo sostenible, la acción por el clima y la reducción del riesgo de catástrofes, ya que “las decisiones que tomemos hoy podrían marcar la diferencia entre un futuro colapso o un avance hacia un mundo mejor”.

Sus comentarios se produjeron en un contexto de incendios forestales mortales en América Latina y Portugal, junto con inundaciones catastróficas en Europa central relacionadas con la tormenta Boris que ha inundado partes de Austria, la República Checa, Hungría, Polonia, Rumanía y Eslovaquia, e inundaciones y corrimientos de tierra provocados por el tifón Yagi que han asolado Vietnam, Myanmar, Laos y Tailandia.

Según los últimos datos internacionales recopilados para el informe Unidos por la Ciencia de este año, hay un 86% de probabilidades de que al menos un año de los próximos cinco supere a 2023 como el año más cálido jamás registrado.

También hay un 80% de probabilidades de que la temperatura media global cercana a la superficie supere temporalmente los 1,5 º Celsius por encima de los niveles preindustriales en al menos uno de los próximos cinco años.

A pesar del sombrío panorama, se han logrado avances significativos en la mitigación de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, que se esperaba que aumentaran un 16% de 2015 a 2030, mientras que el aumento previsto es ahora del 3%. “Pero la brecha de emisiones sigue siendo elevada”, sostiene el informe.

Además, el documento advierte que “para alcanzar niveles compatibles con la limitación del calentamiento global por debajo de 2º y 1.5º, las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero en 2030 deben reducirse en un 28% y un 42%, respectivamente, con respecto a los niveles de emisión que las políticas actuales prevén alcanzar”.