Por Luisa García Pelatti
Entre enero de julio, las entidades financieras ejecutaron 1,480 propiedades residenciales en Puerto Rico, un 2.2% más que en el mismo periodo del año pasado, según los datos más recientes de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF). El valor de estas viviendas asciende a $159.1 millones.
Las ejecuciones de viviendas, que se habían mantenido bajas en los últimos dos años, han empezado a aumentar. Los datos más recientes indican que en abril se ejecutaron 311 viviendas, un 76.7% más que el año pasado, y otras 305 en mayo, un aumento de 18.2%. Las ejecuciones disminuyeron 27.2%, hasta 174 viviendas.
En 2022, los bancos habían ejecutado 2,210 viviendas, un 27.7% menos que en el año anterior y la cifra más baja en, al menos, 12 años, exceptuando el año 2020 cuando las ejecuciones de hipotecas se desplomaron afectadas por la inactividad de la pandemia. Las viviendas reposeídas por los bancos el año pasado tenían un valor de $242.5 millones.
Por otra parte, en junio había 5,551 viviendas en proceso de ejecución, un mínimo histórico. Las viviendas en proceso de ejecución han estado cayendo desde el inicio de la pandemia. El valor de estas propiedades es de $616.6 millones.
Además, en junio había 4,711 hipotecas en proceso de quiebra, 10.8% menos que en junio de 2022. Estas propiedades tienen un valor de $401.2 millones.