Por redacción de Sin Comillas
El Gobierno de Estados Unidos alcanzó el límite máximo de deuda legal fijado por el Congreso $31.4 billones ($31.4 trillion, en inglés), lo que ha obligado al Departamento del Tesoro a adoptar “medidas extraordinarias” para hacer frente a los compromisos y evitar el riesgo de un impago.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, envió una carta al presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, y al líder demócrata, Hakeem Jeffries, en la que pide al Congreso “que actúe con prontitud para proteger la plena fe y el crédito de EEUU”.
Entre las medidas extraordinarias previstas por el Tesoro, que podrían extenderse hasta el 5 de junio, están la suspensión de inversiones en ciertas cuentas del gobierno para poder seguir pagando los cheques de seguro social, el salarios de los empleados federales o de los miembros del ejército. No es la primera vez que Estados Unidos se acerca a un posible impago de su deuda nacional. En los dos últimos años este riesgo ha sido frecuente.
El líder de la minoría republicana en el Senado de Estados Unidos, Mitch McConnell, se mostró confiado en que, pese a las dificultades, “acabaremos en algún tipo de negociación con la Administración sobre las circunstancias o condiciones en las que se elevará el techo de deuda”.