Por Luisa García Pelatti
El pasado 30 de abril, William J. Teuber, Jr., director de la Junta de Popular, Inc. (NASDAQ:BPOP) adquirió 100,000 acciones del banco a un precio de $1.75 por acción. Los títulos cerraron el miércoles a $1.64. Su nivel más alto en las últimas 52 semanas fue de $2.92 y el más bajo $1.08.
La compra de una cantidad tan elevada de acciones por parte de un alto ejecutivo de la compañía se considera un noticia de relevancia. Según explican los expertos, puede haber muchas razones para vender una acción, pero sólo una para comprar: ganar dinero. Los “insiders” compran acciones propias si piensan que el precio es muy bajo y creen que van a subir de forma significativa.
Un estudio de la Universidad de Michigan encontró que cuando los ejecutivos compran acciones de su propia compañía los títulos tienden a crecer un 8.9% por encima del mercado en los próximos 12 meses.
Se conoce como “Insider trades” cuando ejecutivos compran o venden acciones de su propia compañía. “Insider trading” es un actividad legal, pero el término también se utiliza para la actividad ilegal. La ley prohíbe que los empleados de una compañía compren o vendan acciones utilizando información que no es pública y que puede afectar el precio de la acción.
Los “insider buying” son menos comunes que los “insider selling” y son más informativos, porque se asume que los ejecutivos que compran acciones de sus propias empresas deben tener buenas razones para arriesgar sus propios activos. Los ejecutivos son los que tienen la información más actualizada de la salud financiera de una empresa, y algunos piensan que los inversionistas pueden beneficiarse al conocer de forma puntual las transacciones de los “insiders”.